El gobierno bonaerense busca modificar el impuesto sobre la herencia, gravando el reparto que corresponde a cada heredero en lugar de los bienes totales que integran la sucesión. El tributo hasta el momento se aplica siempre que el acervo total a transmitir supere los tres millones de pesos. De aprobarse la ley enviada por el Ejecutivo provincial, el impuesto lo tributarán los herederos que reciban más de 100 mil pesos, con distintas alícuotas según se trate de padres, hijos u otros parientes. La iniciativa prevé además exenciones en los casos de vivienda única o empresas familiares hasta cierto monto de facturación anual. El 80 por ciento de lo recaudado por este impuesto se destinaría al área educativa y el resto a los municipios.