El Indice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó 0,7 por ciento en enero, según los datos que difundió ayer el Indec. En la comparación respecto del mismo mes del año pasado la suba de precios llegó a 10,6 por ciento. Parte de la inflación en el primer mes del año estuvo vinculada con el comportamiento estacional de los servicios turísticos, que crecieron un 5,9 por ciento. Además, impactó la suba en las cuotas de medicina prepaga y el alza en ropa, calzado y equipamiento y mantenimiento del hogar. Para las consultoras privadas, que utilizan diversas metodologías de cálculo y poseen una capacidad operativa mucho menor que la del organismo oficial, el avance de los precios en el mes rondó el 1,8 por ciento y mantienen una proyección para todo el año de alrededor del 23 por ciento.

Hace unos días la presidenta, Cristina Fernández, desplegó la explicación que baraja sobre la suba de precios. En su visión, las sensibles mejoras en el mercado de trabajo favorables a la clase trabajadora respecto de los comienzos de la gestión kirchnerista, tanto en los niveles de empleo como en los salarios, generaron un boom de consumo del que se aprovechan los empresarios. En este contexto, los formadores de precios, productores y comercializadores, retocan sus pizarras porque la demanda lo convalida. Según esta versión, no existiría inflación, entendida como un aumento generalizado de precios, sino una fuerte “distorsión y dispersión” de precios.

Las cifras oficiales marcaron para enero un alza de 0,7 por ciento, una décima por debajo del registro de diciembre. El capítulo del IPC que más creció fue atención médica y gastos para la salud, con el 2,4 por ciento. Este desempeño se explica por la suba de entre el 15 y el 17 por ciento en las cuotas de medicina prepaga, cuyo impacto también se sentirá en febrero. En cambio, los precios de los medicamentos se mantuvieron planchados. El aporte que este segmento hizo al IPC fue de 0,14 puntos, una quinta parte del total.

El rubro que le siguió fue indumentaria, con el 2,1 por ciento, con una incidencia en la inflación mensual de 0,16 puntos. En el desagregado, la ropa creció 2 por ciento, mientras que el calzado lo hizo en 2,4 por ciento. El capítulo de esparcimiento también subió 2,1 por ciento, por el arrastre de la temporada turística, y aportó 0,11 punto al IPC. Dentro de ese capítulo, los servicios de turismo, que incluyen la tarifa de los pasajes de ómnibus a los principales centros de veraneo, los precios de los hoteles y de un conjunto de excursiones y paquetes turísticos avanzaron 5,9 por ciento. Fue seguido por diarios, revistas y libros, con el 2,3 por ciento. Además, los precios de los equipos de audio, televisores, computadoras y servicio de TV por cable avanzaron 0,7 por ciento.

A diferencia de lo ocurrido el año pasado, en enero las carnes bajaron 1,6 por ciento. Dentro de ese grupo no sólo se encuentra la carne vacuna, sino también la de aves, pescados y fiambres. También bajaron los productos de panificación, cereales y pastas (-0,1) y verduras (-0,3 por ciento). En cambio, aceites y grasas subió 1,7 por ciento, de forma similar a azúcar, miel, dulces y cacao (2,1), frutas (1,0), productos lácteos y huevos (0,9) y bebidas e infusiones para consumir en el hogar, que registró un avance de 1,5 por ciento. Estos productos determinaron una leve suba general del capítulo de alimentos y bebidas de 0,2 por ciento, que sólo aportó 0,06 punto al índice.

En tanto, mantenimiento y equipamiento del hogar creció 1,4 por ciento. Los mayores aumentos al interior del capítulo fueron para textiles, artefactos y reparaciones de equipos. Por su parte, el alquiler de la vivienda creció 0,5 por ciento, educación avanzó 0,2 por ciento, a partir de libros de textos y útiles escolares, que subieron 1,5 por ciento, mientras que transporte subió 0,7 por ciento, por la suba en los precios de los combustibles que tuvieron lugar en diciembre y dejaron un arrastre importante en enero. El impacto de transporte y comunicaciones en el IPC fue de 0,09 punto. Por otro lado, el costo de la construcción que mide el Indec subió en enero 2,1 por ciento y acumula en un año una suba de 22,8 por ciento.