Hoy a las 15 se realizará una nueva asamblea de accionistas de Siderar, donde el Estado nombrará tres representantes en el directorio de la firma. Además se aprobará la distribución de alrededor de 1500 millones de pesos en materia de dividendos. El Gobierno y el Grupo Techint llegaron a un acuerdo para evitar una nueva impugnación de la asamblea donde la empresa reconoce el pleno derecho político del 26 por ciento de las acciones que posee Anses y las partes se comprometieron a “dejar en abstracto” las demandas judiciales cruzadas. El orden del día consensuado para llegar al convite contempla también que la compañía precise el destino de los 6455 millones de pesos acumulados como resultados no distribuidos y presente un plan de inversiones. Según afirmaron desde el Poder Ejecutivo a este diario, los accionistas mayoritarios de Siderar están al tanto de los directores que propondrá Anses. Uno de ellos es el economista y subgerente general de Aerolíneas Argentinas, Axel Kicillof. Las otras dos personas serán funcionarios de los ministerios de Planificación y Economía.

La asamblea original celebrada a mediados de abril se frustró cuando el Grupo Techint desconoció el decreto 441 que modificó el esquema de participación en las compañías donde la Anses mantiene inversiones. En ese momento, la relación entre el holding y el Gobierno llegó a su punto de mayor tensión en medio de demandas judiciales cruzadas. El mes pasado, lentamente se reactivaron las líneas de comunicación a medida que la firma comenzó a ceder en su posición. El ministro de Planificación, Julio De Vido, y el director corporativo de Techint, Luis Betnaza, comenzaron a allanar el camino para “construir coincidencias” y destrabar el conflicto. En una segunda instancia, se sumaron a las conversaciones el ministro de Economía, Amado Boudou, y el director ejecutivo de Anses, Diego Bossio. Zanjadas las principales diferencias políticas, los equipos de abogados comenzaron a trabajar para llegar al encuentro de hoy con todos los temas del día ordenados.

Si el convite transcurre sin imprevistos, el paso siguiente será dejar en abstracto las tres demandas judiciales: una presentación realizada por la CNV donde declaró irregular e ineficiente el primer encuentro entre los accionistas, un reclamo de suspensión de la asamblea que presentó la Anses convalidada en primera instancia y luego apelada por la empresa y un pedido de inconstitucionalidad del decreto 441 por parte de Siderar.

Ayer todavía quedaban algunos “aspectos menores por cerrar”. “Hay buena predisposición de ambos lados. La Anses va a nombrar tres directores de acuerdo con sus tenencias accionarias y se va a avanzar alrededor del tema de los dividendos no distribuidos que acumula Siderar. El Estado no reclama en forma voraz dividendos, lo que sí queremos saber es dónde están invertidos”, explicaron a Página/12 fuentes oficiales vinculadas a esas negociaciones. Sobre los 1500 millones de pesos en dividendos que los accionistas mayoritarios quieren distribuir, a la Anses le corresponden alrededor de 393 millones de pesos. Además, existen 6455 millones de pesos acumulados en el balance a cuenta de futuros dividendos que la empresa precisará dónde están invertidos. Según pudo saber este diario, una porción corresponde a ganancias de capital por stocks de materia prima que se valorizaron por aumentos de precios y por lo tanto no son “líquidas”.

Los representantes de la Anses volverán a impulsar al investigador Axel Kicillof para ocupar un cargo en el directorio de Siderar. El economista había sido resistido por la empresa en abril. Los otros nombres no se conocen, pero ya están definidos. Entre los posibles candidatos circularon el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino, y el subsecretario de Financiamiento, Adrián Cosentino. En las últimas horas se sumó el nombre de Demián Camacho, un colaborador cercano al ministro de Planificación, y Roberto Baratta, subsecretario de Coordinación de Gestión y Control de esa cartera. Camacho ya se desempeña como director suplente en Gas Natural Ban. En la cartera que conduce De Vido destacaban ayer sus capacidades técnicas y su conocimiento de la industria siderúrgica, mientras que desde el sector empresario ponderaban su perfil bajo.