El Banco Central y la Unidad de Información Financiera (UIF) realizaron ayer un conjunto de inspecciones en seis casas de cambio del microcentro porteño. Los operativos, que apuntan a desalentar la actividad de los coleros y las transacciones irregulares vinculadas con el lavado de dinero, continuarán la semana próxima. Las acciones de control se dieron en un día de intensas operaciones en el mercado cambiario. La cotización del dólar cerró sin cambios, a 4,26 pesos, pero la autoridad monetaria intervino activamente para satisfacer la demanda de divisas. Vendió 150 millones de dólares y superó los 900 millones en el mes. Las reservas cedieron hasta los 47.802 millones de dólares. Se trata del registro más bajo desde abril del año pasado y evidencian un retroceso cercano a los 5000 millones desde el pico alcanzado en enero.

La última semana la demanda de divisas volvió a registrar un incremento sensible, un comportamiento tradicional en las jornadas previas a elecciones que, según consideran en el equipo económico, fue potenciado por los pronósticos y análisis de un conjunto de consultores. Esos analistas argumentan que el tipo de cambio está atrasado, por lo tanto el precio del dólar es bajo. La consecuencia lógica en ese razonamiento es que se registrará un movimiento al alza en el valor de la divisa. En el Banco Central rechazan esa hipótesis y aseguran que “es un error apostar que el dólar va a registrar un sobresalto después de las elecciones, el objetivo es preservar la competitividad cambiaria y evitar la volatilidad en el precio de esa moneda”. En lo que va del año, la cotización del dólar arrojó una devaluación nominal de 6,2 por ciento, un aumento de 25 centavos.

En un escenario de tensiones cambiarias, fuga de capitales y crisis financiera internacional, la estrategia de la entidad que conduce Mercedes Marcó del Pont fue ofrecer diariamente al mercado una cantidad de dólares superior a su demanda y realizar operaciones en el mercado de futuros que desincentiven las compras en el segmento de contado. Ese mecanismo implicó el insumo de más de 900 millones de dólares de reservas, pero mantuvo a raya el precio del billete norteamericano a 4,26 pesos a lo largo del mes. El stock de divisas de la autoridad monetaria retrocedió hasta su mínimo en 18 meses, aunque persiste en niveles elevados en términos históricos. Si bien no existen estimaciones precisas, en el equipo económico advierten que la demanda está compuesta principalmente por minoristas y empresas de distinto tamaño. El jueves la entidad debió vender 180 millones de dólares y ayer las ventas alcanzaron los 150 millones de dólares.

El Banco Central y la UIF aprovecharon la configuración del actual escenario cambiario para realizar operativos conjuntos en el microcentro porteño. Los inspectores detectaron un conjunto de presuntas infracciones que serán analizadas la próxima semana y a su vez se identificaron más de 80 “coleros” que fueron inhabilitados para operar en el mercado cambiario. Se trata de una limitación provisoria que se revierte si los individuos señalados pueden demostrar que sus operaciones tienen sustento económico.

Mientras que el Banco Central se concentró en la detección de irregularidades vinculadas con el mercado cambiario, el organismo que encabeza José Sbattella apuntó hacia las operaciones vinculadas con el lavado de dinero. Las inspecciones no son un elemento novedoso, aunque la decisión de llevarlas adelante ayer no fue una coincidencia, se realizaron el día en que esperaban mayores presiones para aplacar las operaciones meramente especulativas. Los operativos conjuntos continuarán la semana que viene.

Por su parte, las 19 acciones que componen el índice Merval despidieron la semana con un alza de 2,2 por ciento, en sintonía con las principales Bolsas de Europa y Estados Unidos. Las acciones del Banco Macro subieron 7,3 por ciento, Banco Francés mejoró 4,3 por ciento, mientras que Tenaris y Petrobras lo hicieron 2,6 por ciento. En tanto, los títulos de la deuda cerraron con resultados mixtos en una jornada con un bajo volumen de operaciones. El Descuento en Pesos bajó 3,5 por ciento, el Boden 2012 retrocedió 0,1 por ciento y el Bogar 18 operó sin cambios.