Los negocios en el mercado de cambios se desarrollaron ayer en calma, con un descenso pronunciado de la demanda mayorista y del público. En las pizarras del microcentro, el precio promedio para la venta se mantuvo en 4,29 pesos. Los bancos privados también contribuyeron a una menor presión sobre la demanda. Muchos vendieron dólares y se cubrieron mediante contratos a futuro, que ofreció el Banco Central. El nuevo marco de requisitos mínimos de liquidez que aprobó el viernes pasado la autoridad monetaria diluyó la incertidumbre, lo que también pudo verse en el descenso del precio para las operaciones informales, que retrocedió 20 centavos, a 4,83 pesos. En tanto, los bancos habilitaron nuevamente la compraventa de dólares on-line o en sus cajeros, a partir de una adecuación del sistema de consulta con la AFIP.

A pesar de la mayor tranquilidad cambiaria, el volumen de reservas volvió a retraerse. El stock se ubicó en 46.374 millones de dólares, con un descenso de 204 millones. La caída, explicaron en el Central, respondió al pago de obligaciones con organismos de crédito y al retroceso en los precios de los activos que componen la cartera de reservas. Sin embargo, continúa también el impacto del retiro de dólares de los bancos de las cuentas del organismo para responder a la demanda de los ahorristas. En lo que va del mes, las reservas se redujeron en 900 millones de dólares.

La implementación de controles fiscales para operaciones de compra de divisas había generado en un primer momento nerviosismo en la plaza cambiaria. Con el transcurrir de los días, la demanda y las consultas en los bancos fueron disminuyendo, pero se inició un proceso de fuerte salida de depósitos de ahorro. En la primera semana se retiraron del sistema 645 millones de dólares. En este caso, los rumores alertaban sobre la incapacidad de la banca privada de hacer frente al retiro de los ahorros en moneda extranjera. Con el objetivo de acallar esas voces, el Central resolvió flexibilizar el monto mínimo que los bancos deben mantener en las cuentas del organismo monetario.

Hasta ayer, los bancos debían inmovilizar por cada dólar depositado, unos 20 centavos como encaje y lo que no prestaran también iba a una cuenta especial del Central. La resolución permite que los bancos ahora mantengan en sus bóvedas el saldo por encima del encaje y de los préstamos, para satisfacer la demanda de sus clientes. “La medida tuvo un efecto inmediato. Todo lo que sirva para dar liquidez al sistema y tranquilidad a la gente relaja al mercado”, explicó a este diario Fernando Izzo, director de ABC Mercado de Cambios. Un ejemplo de la normalización de las operaciones fue su bajo volumen. Se operaron apenas 270 millones de dólares, contra un promedio habitual que se ubica por encima de los 500 millones. Tampoco hubo un retiro importante de la liquidez disponible de parte de los bancos. “Los bancos tienen los dólares disponibles y, cuando los necesiten, se los llevan, sin que eso implique incumplir con el mínimo que debían tener a diario”, señalaron fuentes de la entidad que conduce Mercedes Marcó del Pont. “Cualquier persona puede retirar los dólares de su cuenta cuando quiera”, aseguró el presidente del Banco Provincia, Guillermo Francos.

El Central no intervino durante la rueda en el mayorista. Sólo ofreció a los bancos cobertura con contratos de dólar a futuro. El organismo monetario vendió los futuros a fin de año a un precio cercano a la cotización actual del mayorista, incentivando a los bancos a desprenderse de los dólares físicos y cubrirse –casi sin costo– de una apreciación de la divisa con este tipo de contratos, los cuales se negocian en pesos y se cancelan por la diferencia entre lo pactado y el valor de la moneda al vencimiento. Este tipo de cobertura no implica sacrificar reservas. A fin de mes, el dólar futuro se negoció en 4,286 pesos y en 4,289 para fin de año. Los operadores consultados por este diario indican que aún existen cerca de 400 millones de toneladas de maíz y trigo paradas que, una vez autorizados sus despachos, incrementarán la oferta de dólares.

La mayor liquidez en los bancos en dólares también descomprimió el valor de las operaciones en el pequeño segmento informal. Los negocios de contado con liquidación fueron escasos y su valor rondó entre 4,72 y 4,74 pesos, según el título que se haya utilizado. El dólar “blue”, que se negocia en las denominadas cuevas, finalizó en 4,83 pesos, tras haber alcanzado los 5 pesos la semana pasada.