Si se confirman las versiones difundidas el pasado fin de semana, el cargo de gerente general del Banco Central podría quedar vacante con el alejamiento de Benigno Vélez. El funcionario había desembarcado en la autoridad monetaria a comienzos de 2010, cuando Mercedes Marcó del Pont fue designada como presidenta de la institución en reemplazo de Martín Redrado. La designación de Vélez en el BCRA no fue impulsada por Marcó del Pont, sino por el entonces ministro de Economía y actual vicepresidente, Amado Boudou, a quien había acompañado en el Palacio de Hacienda. Allí se había desempeñado como secretario legal y administrativo. La relación entre Vélez y la titular de la entidad no fue buena desde el principio y las diferencias se profundizaron en 2010, cuando se registraron inconvenientes por la falta de billetes. El alejamiento de Vélez de la entidad no es una novedad en el equipo económico, donde señalan que hace tiempo que pretendía recaer en otra institución como la Superintendencia de Seguros o el Banco Nación. El funcionario habría presentado su renuncia el viernes pasado. El reemplazante de Vélez sería el director del Banco Nación, Matías Kulfas. El economista, presidente de AEDA, mantiene un antiguo y estrecho vínculo con Marcó del Pont.