Argentina ratificará esta semana la decisión de revisar el acuerdo automotor con México actualmente vigente. Y en caso de no encontrar gestos en las autoridades mexicanas a favor de la renegociación del acuerdo, tomaría medidas de acción directa en el corto plazo que afectarían el ingreso de unidades de, al menos, cinco marcas de primera línea: dos estadounidenses (Ford y General Motors), dos japonesas (Nissan y Honda) y una alemana (Volkswagen).

El anticipo, que surgió de fuentes oficiales, señala que las autoridades argentinas evalúan restringir la importación de autos montados en México ante los indicios de que el gobierno de ese país no estaría dispuesto a negociar el acuerdo firmado en 2002, identificado como ACE 55, que a partir de 2008 empezó a generar un saldo deficitario creciente para Argentina.

“El conflicto no surge a partir de la declaración de los 40 países contra la política comercial argentina tras la reunión de la OMC, sino que está planteado desde mucho antes”, señaló la fuente consultada por este diario. “Al contrario, fueron autoridades mexicanas las que ofrecieron a la Argentina no firmar ese documento si nuestro país desistía de denunciar el acuerdo automotor binacional”, agregó la misma fuente.

En la declaración a la que aludió la fuente del documento firmado en esta semana por Estados Unidos, los 27 miembros de la Unión Europea y un grupo de doce países, entre los que se cuenta México, se critica la política de administración del comercio que aplica la Argentina y que el viernes último fue rechazada por el canciller Héctor Timerman. El titular de Relaciones Exteriores acusó a Estados Unidos de ser promotor de esa declaración, que se suma a la reciente suspensión para la Argentina de los beneficios del sistema de preferencias arancelarias de aquel país. Timerman les imputó a Estados Unidos y a las autoridades europeas “pretender que desde Argentina absorbamos la crisis que ellos padecen, impidiéndonos defendernos”. Similar criterio fue planteado por la representante argentina ante las comisiones de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Cecilia Nahón, quien sostuvo la semana pasada que “Argentina no incumple la normativa de la OMC con su política de administración del comercio”.

La presunción de las autoridades argentinas respecto de la probable negativa de México a renegociar el acuerdo automotor no parte únicamente de ese cruce de la última semana. Veinte días atrás, la ministra de Industria, Débora Giorgi, había reclamado un encuentro con autoridades mexicanas para tratar ese punto, pero no se pudo concretar. La intención de la funcionaria argentina era plantear el reclamo de que México compre más autos de fabricación argentina para compensar el comercio sectorial, que sólo en el último año (2011) favoreció a la nación azteca en aproximadamente mil millones de dólares. Para lograrlo, reclamó la necesidad de rediscutir los lineamientos del Acuerdo de Complementación Económica número 55 (ACE 55), firmado en 2002, que establece las pautas del comercio de vehículos y autopartes entre México y los cuatro países integrantes del Mercosur.

Al no prosperar la propuesta de diálogo y negociación planteada por Argentina, el Gobierno adoptaría en los próximos días medidas orientadas a lograr el objetivo de equilibrar el comercio automotor con México. Las alternativas que se manejan son dos: denunciar el ACE 55 y obligar a las partes a rediscutir las condiciones de ingreso de vehículos a la Argentina, o exigir a las firmas importadoras (en general, las filiales argentinas de las automotrices de la misma marca) que compensen “uno a uno” el valor de los vehículos ingresados al país, pero con exportaciones a México. “No valdrá que una terminal nos explique que importa ciertos modelos desde México que compensa con ventas de otro modelo a Brasil; de lo que se trata es de aumentar las ventas a México”, explicó la fuente oficial.

Las marcas y modelos que ingresan a la Argentina con procedencia mexicana son: Nissan (Tiida, Sentra y Frontier); Volkswagen (Vento, New Beatle y Bora); Dodge (Journey); Honda (CRV); Ford (Fiesta); Chrysler (PT Cruiser) y General Motors (Aveo).