ECONOMíA
Lavagna busca en las AFJP plata para hacer viviendas
El ministro quiere financiación y dice que las AFJP la tienen. Su proyecto de reforma del sistema previsional contempla obligar a que parte de sus fondos se destine a financiar planes de viviendas.
› Por Claudio Zlotnik
Roberto Lavagna dio ayer otra señal de que les apunta a las AFJP como uno de los ejes de su nueva gestión, en el gobierno de Néstor Kirchner. Insistió en que impulsará un sistema “mixto”, con la posibilidad de que los aportantes a las administradoras puedan retornar al Estado. El plan del ministro tiene otros capítulos, como el que propone que las AFJP destinen una porción importante de su recaudación –podría ser de hasta la tercera parte– a inversiones productivas de largo plazo.
La mira de Lavagna está puesta en los fondos que mensualmente recaudan las administradoras de fondos de pensión. Son unos 160 millones de pesos. Ayer volvió sobre el tema durante una disertación frente a 150 empresarios de la Cámara Franco-Argentina de Comercio. La idea del titular de Hacienda es que una parte de ese dinero financie inversiones de largo plazo. Uno de los proyectos más ambiciosos apunta a la construcción de viviendas. Como es improbable que los bancos otorguen préstamos de largo plazo, como los hipotecarios, el proyecto busca que ese espacio lo ocupen las AFJP que, justamente, perciben dinero de sus afiliados a largo plazo. Al respecto, los técnicos de Economía están elaborando los instrumentos financieros que permitirían poner en marcha el procedimiento.
La decisión implicaría un cambio drástico en el funcionamiento del sistema de jubilación privada. Desde sus comienzos, las AFJP privilegiaron las inversiones financieras, en especial bonos de la deuda y plazos fijos. En la actualidad, un 75 por ciento de los 41.000 millones de pesos administrados por las operadores se encuentran invertidos en títulos públicos. A mucha distancia, un 7 por ciento está en acciones de empresas locales, un 5,4 por ciento en papeles de compañías extranjeras y un 3 por ciento en plazos fijos. Esta realidad generó una polémica, ya que los dueños de las AFJP y los economistas del establishment que respaldaron la creación del modelo culpan al Estado por la sobreexposición en títulos de la deuda que cayeron en default. “Nos obligaron”, suelen justificar los financistas y analistas (ver recuadro). Sin embargo, la preferencia por los bonos de la deuda es histórica, dados los jugosos rendimientos que mostraban esos activos.
En el Palacio de Hacienda realizaron un informe que deja mal paradas a las AFJP. El documento precisa que la mayor parte del aumento de la deuda desde que se creó la jubilación privada fue por culpa de este sistema. En números, entre 1995 y 2001 la deuda pública aumentó en 57.632 millones de pesos. Según Economía, el 65 por ciento de este incremento fue por el desvío de los aportes jubilatorios del Estado a favor de las empresas privadas.
Otro dato de peso que maneja Lavagna en contra del sistema privado refiere al dinero perdido por los afiliados en esos seis años. Hasta el 2001, de los 27.000 millones de pesos aportados por la gente, en las cuentas sólo había unos 20.800 millones. La diferencia de 6200 millones quedó en las administradoras por las comisiones cobradas. En cambio, si el público hubiese colocado el dinero en cajas de ahorro habría ganado unos 10.400 millones de pesos. Tendrían 37.400 millones. Este ejemplo demuestra el agujero negro en que se convirtió el sistema de jubilación privada y las fuertes ganancias que proporcionó a los bancos dueños de las administradoras.
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