La actividad de la construcción retrocedió durante agosto un 8,1 por ciento respecto de igual mes del año pasado, según informó ayer el Indec. Frente a julio previo el sector también perdió 8,1 por ciento, siempre en términos desestacionalizados, llevando al indicador nuevamente a terreno negativo tras dos meses de recuperación (junio y julio). A partir de este resultado, en ocho meses la actividad acumula una contracción de 1,8 por ciento, profundizando el retroceso que se inició en mayo. La contracción de agosto es la sexta de los primeros ocho meses del año y la segunda más grande del año, sólo superada por la caída de 8,9 por ciento que se produjo en mayo pasado.

“Las ventas al sector de los insumos considerados para la elaboración de este indicador en agosto último se vieron afectadas por una anormal situación climática que redujo la actividad durante este mes”, señala el Indec, en referencia a las importante cantidad de días con lluvias que se registraron ese mes. En la comparación interanual se observan caídas de 34,4 por ciento en asfalto, 16,6 en cemento, 7,4 en pinturas para construcción, 4,1 en hierro redondo para hormigón, 3,9 en ladrillos huecos y 1,1 en pisos y revestimientos cerámicos.

Por su parte, la superficie para construir registrada en los permisos de edificación para obras privadas registró en agosto una baja de 20,3 por ciento con relación a igual mes del año anterior. En tanto, la encuesta cualitativa entre firmas del sector sobre las expectativas para septiembre arrojó resultados disímiles. Entre los empresarios que se dedican principalmente a obras públicas, el 40 por ciento estimó que la actividad se mantendrá sin cambios, mientras que 36,7 sostiene que disminuirá y 23,3 que aumentará. Entre quienes realizan principalmente obras privadas, el 64,7 por ciento cree que el nivel de actividad se mantendrá sin cambios en septiembre, 23,5 estima que disminuirá y el 11,8 que aumentará.