La soja cotizó ayer a 508,27 dólares en el mercado de Chicago, con una baja de 1,3 por ciento respecto del cierre anterior. La caída estuvo motivada en la cancelación de China de un pedido de 600 mil toneladas de soja estadounidense. Los precios vienen descendiendo luego de llegar al pico de 650,74 dólares la tonelada el 4 de septiembre, y se acercan a los valores de fines de mayo, cuando cotizó en torno de los 500 dólares la tonelada.

Las variaciones del mercado durante este año son fuertes, ya que a fines de agosto y principios de septiembre la cotización alcanzó los 650 dólares por tonelada. Esto se explicó por los vaivenes de la oferta, ya que Brasil y Argentina sufrieron una sequía a comienzos de año que afectó la producción y los Estados Unidos se vieron afectados por la peor sequía en cinco décadas, siendo los tres países los principales exportadores de soja en el mundo. Lo novedoso es que los problemas comienzan a observarse en la demanda por el mercado interno chino.

Importadores de China cancelaron ayer pedidos de soja por 600 mil toneladas. Durante la ronda, los precios se aproximaron a los del 5 de junio pasado, cuando perforaron el piso de los 500 dólares y cerraron a 495,87 dólares. “Hay una fuerte tendencia bajista en el mercado, ya que China no había tenido cancelaciones de cargamentos múltiples en mucho tiempo”, explicó un analista agrícola en Melbourne.