La Unión Industrial Argentina salió ayer a criticar la decisión del gobierno de prorrogar hasta diciembre la doble indemnización por despido. En un comunicado, la entidad patronal asegura que “comparte el objetivo del Gobierno de preservar las fuentes de trabajo”, pero que “sin embargo, hubiera preferido que se elimine la doble indemnización”.
Pese a sus peleas internas, la UIA, que agrupa a las mayores empresas industriales del país, fue una de las asociaciones empresarias que más apoyó al nuevo gobierno desde su asunción. También es cierto que sus principales socios están entre las compañías más favorecidas por la devaluación.
No obstante, ayer, por primera vez, enfrentó abiertamente una medida tomada por la administración Kirchner. Según la entidad fabril, que conduce el ex menemista Alberto Alvarez Gaiani, representante de la liberal cámara de empresas alimentarias, “han desaparecido la mayor parte de los factores que hicieron necesaria la medida”. Y sentencia: “La doble indemnización conspira directamente contra la creación de nuevos empleos y distorsiona el mercado laboral”.
Rechazando la crítica de los empresarios, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, defendió la medida, con el argumento de que, sin ella, los despidos hubieran sido mucho mayores a los efectivizados en los últimos meses.