La CTA le reclamó ayer al ministro Julio De Vido la regulación de la actividad petrolera, el impulso a la creación de una empresa estatal petrolera y garantizar el abastecimiento interno privilegiándolo sobre la exportación. “Argentina no es un país petrolero, pero exporta como si lo fuera”, señaló Lozano frente al ministro de Planificación, situación que atribuyó al monopolio privado existente en el sector. Según el análisis desgranado ante De Vido por el responsable de estudios económicos de la CTA, carece de sentido regular el precio de la electricidad y el gas de consumo residencial mientras que los precios de sus principales materias primas son fijados libremente por los productores. La propuesta parte de redefinir los servicios públicos como un bien social y, por tanto, como una herramienta de desarrollo social y redistribución de ingresos. Por otra parte, la CTA reclamó la intervención de los entes reguladores y de los órganos de control en general, y la fusión en un ente único de los que actualmente funcionan en el área energética (Enargás y ENRE).