“El Gobierno va a seguir trabajando para redireccionar toda la batería de subsidios, de modo que el que ya no lo necesita no lo reciba y vaya al que aún lo precisa”, indicó ayer el ministro de Economía, Axel Kicillof. El funcionario agregó que la quita de subsidios a los servicios de agua y gas no fue para conseguir caja fiscal, al tiempo que criticó a medios de comunicación por informar la medida como un tarifazo, mirando el alza de las facturas en porcentajes y no en valores relativos. A su vez, precisó que esta iniciativa permite incrementar recursos para sectores de menores ingresos, potenciando la inclusión social.

“Hoy estamos encarando una profundización, una sintonía fina en el tema subsidios. Lo estamos haciendo con la tranquilidad que da el hecho de que no hay una necesidad imperiosa de reducirlos. No hay ningún problema. Lo estamos evaluando con análisis serios”, dijo Kicillof. Desde Economía difundieron un informe que precisa que los subsidios en 2013 ascendieron a 98 mil millones de pesos, lo cual representa 3,6 por ciento del Producto. El dato adquiere relevancia si se tiene en cuenta que estimaciones privadas calcularon que estos recursos estatales para las empresas habían alcanzado una participación del 5 por ciento del Producto, generando distorsiones en las cuentas fiscales del Gobierno.

Además de desmentir la idea de que la quita de subsidio se debió a la necesidad de “conseguir caja (para el sector público)”, el ministro negó que los incrementos de las facturas en agua y gas hayan sido un tarifazo. “Perdonando la expresión, son bastante caraduras los que antes hablaban de la necesidad de bajar los subsidios y ahora hablan de tarifazos”, dijo el funcionario. Criticó a medios de comunicación, los que se centraron en el porcentaje de los incrementos y no en el valor absoluto del alza de las facturas. “Por ejemplo, para un lugar de consumo reducido, que representa a 7 millones de usuarios de gas, alguien que paga hoy 20 pesos pasaría a pagar en abril 8 pesos más bimestrales”, indicó.

Por su parte, mencionó que la reducción de subsidios irá para los sectores más necesitados (vulnerables) de la sociedad. La mecánica de la medida contempla que los recursos que se dejarán de gastar en cubrir el costo de producción y distribución de los servicios de agua y gas se destinarán al incremento de la Asignación Universal por Hijo y del plan Progresar, iniciativas clave del Gobierno para potenciar la inclusión. “Esto irrita a algunos, por esto hablan de tarifazos o de ajustes”, cerró el titular del Palacio de Hacienda.