El economista Mario Rapoport aseguró que la postura del juez Thomas Griesa y de los fondos buitre son “una venganza contra Argentina, porque inició un camino que a los norteamericanos no les gusta”. “Argentina mostró su intención de pagar, por lo que no está en default. Es un default de Griesa, que lo asumirá él porque no quiere que esos fondos vayan a los bonistas”, agregó el economista. Rapoport sostuvo que “en los mercados financieros el que compra los títulos tiene que esperar a que los bonos bajen o suban, no pueden iniciar juicios de esta forma para obtener ganancias que son irrealizables”. “En diciembre se les hubiera pagado perfectamente. ¿Qué les hace a estos multimillonarios esperar por 1300 millones de dólares para cobrar su deuda? Argentina no puede embarcarse en un pago que va a implicar 200 mil millones de dólares cuando esto se puede resolver muy fácilmente a fin de año”, concluyó.