ECONOMíA
El CVS ahora aumenta muy por arriba de la inflación
El coeficiente con que se ajustan los créditos hipotecarios para vivienda única aumentó 2,5 por ciento en agosto y ya acumula una suba del 6,3 por ciento en lo que va del año.
El coeficiente de variación salarial (CVS) por el cual se ajustan los créditos bancarios hipotecarios, prendarios y personales de menor monto registró una suba del 2,49 por ciento en agosto. Así, en lo que va del año el CVS ya acumula un alza del 6,3 por ciento, muy por encima de la inflación. Paradójicamente, el mecanismo de ajuste salarial había sido ideado para atenuar sobre los deudores más débiles el impacto de la inflación. En este contexto, fuentes del Ministerio de Economía dejaron trascender que el Ejecutivo enviará al Congreso un proyecto de ley para solucionar el problema de los deudores con hipotecas sobre su vivienda única que hayan caído en mora con posterioridad a diciembre del 2000, cuyo capital adeudado no supere los 80.000 pesos y la vivienda en riesgo de ejecución, los 100 metros cuadrados.
El salvataje se realizará a través de la creación de un nuevo fideicomiso, el cual pagará a los acreedores, bancos o agentes por fuera del sistema financiero la totalidad de las cuotas adeudadas a la fecha, pudiendo emitir al efecto nuevos instrumentos de deuda. En adelante el fideicomiso pagará según las condiciones originalmente pactadas, así como las emergentes de los nuevos coeficientes de actualización y tasa de interés. Los deudores, en tanto, se verán beneficiados con 1 año de gracia y el recálculo del monto de las cuotas de acuerdo con el ingreso del grupo familiar, el saldo del préstamo pendiente de pago y el valor actual de la vivienda. En virtud de que este recálculo pondrá las cuotas en línea con la capacidad de pago de los deudores, cuando el deudor incurra en mora de dos cuotas consecutivas o tres alternadas, el Estado se reserva el derecho automático de ejecutar la hipoteca.
El Indec informó ayer que el Indice Salarial, que toma en cuenta la variación de las remuneraciones en el sector privado –tanto formal como informal– y en el sector público, creció sólo el 0,8 por ciento, un cuarto del incremento del CVS. La diferencia se explica porque este último toma en consideración la incorporación a los salarios –con carácter remunerativo– del aumento de 200 pesos otorgado desde marzo último. Dicha incorporación será paulatina, en ocho cuotas: desde julio pasado hasta marzo próximo. En julio el CVS subió 2,28 y se estima que hacia marzo habrá crecido alrededor del 15 por ciento en apenas ocho meses.
Por lo tanto, en esa magnitud se incrementará también el capital de las deudas actualizadas por este índice: los créditos hipotecarios para vivienda única, los prendarios hasta 30 mil pesos y los personales hasta 12 mil.
Para esos préstamos el CVS vino a reemplazar al CER (el coeficiente que sigue a los precios), después de que en abril de 2002 la inflación trepara al 10 por ciento y se hiciera evidente que la escalda de precios posdevaluación tornaría incobrables los créditos de los deudores de ingresos fijos. El año pasado tal decisión fue acertada, ya que durante el 2002 la inflación minorista llegó al 45 por ciento y en esa proporción se ajustaron los créditos pesificados de mayores montos.
Sin embargo, este año las cosas cambiaron diametralmente. En el 2003, la suba del índice de precios al consumidor no será del 35 por ciento como preveía el FMI en enero, ni del 22 por ciento como proyectó el Ministerio de Economía en marzo. Con toda seguridad la inflación será de un dígito y hay muchos que apuestan a que estará incluso debajo del 5 por ciento.
Por el contrario, desde octubre pasado, cuando empezó a aplicarse, el CVS aumentó 7,16 por ciento (6,3 por ciento sólo en este año), y en marzo podría acumular una suba cercana al 18 por ciento.
Esta variación pone en una situación delicada a los deudores en situación más frágil, los que ahora podrán acogerse voluntariamente al nuevo régimen pensado por el Ejecutivo.