El ministro de Economía, Roberto Lavagna, ratificó antes de partir hacia Nueva York para continuar la renegociación con acreedores privados, que la quita propuesta para los títulos de la deuda en default “es del 75 por ciento, no del 73 ni del 74” por ciento, eliminando así cualquier duda sobre la posibilidad de flexibilizar la iniciativa presentada el 22 de septiembre pasado en Dubai.
“Hay muchos inversores que fueron inducidos por los bancos a invertir en papeles de riesgo y ahora les toca asumir la realidad”, señaló Lavagna en el Círculo Italiano de Buenos Aires, donde fue invitado a realizar una disertación.
En tanto, analistas de los principales bancos privados de Alemania, entre ellos el Deutsche Bank y el Dresdner Bank, declararon ayer su temor a que otros países endeudados “sigan el mal ejemplo de Argentina y reduzcan sus esfuerzos para solucionar sus problemas de endeudamiento”.
En otro orden, Lavagna aseguró que contar con superávit fiscal “está en el centro de una política económica progresista”. Además señaló que “hasta hace poco se decía que el crecimiento debía provenir de las exportaciones. Pero esto no es así, porque las exportaciones no tienen fuerza para arrastrar la economía de un país que está 20 por ciento abajo de su capacidad de producción”, afirmó. Para el ministro, “el motor de la economía es el consumo” y consideró que las ventas externas serán el “lubricante” porque aportan las divisas para la inversión. Por último destacó que, “si el interior del país no crece, podemos decir que la política económica es mala. El PBI puede crecer ligado a las finanzas, pero ese crecimiento ni siquiera está concentrado en esta ciudad (de Buenos Aires) sino en un pedacito de ella”, completó.