La Presidenta inauguró en El Calafate el Centro de Informes de Parques Nacionales.
Imagen: Télam.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró que “el logro más importante” de su gobierno “es haber empoderado a una sociedad de derechos”, y –en pleno clima preelectoral– pidió votar con responsabilidad en los comicios de este año. Desde la localidad de El Calafate, en la provincia de Santa Cruz, donde inauguró el Centro de Informes de Parques Nacionales, la ampliación del Paseo Costero y la sede de la Secretaría de Turismo, la Presidenta aseguró: “Lo maravilloso de esta democracia es saber que ya no se le puede echar la culpa a un gobierno sino que cada argentino tendrá que hacerse responsable de qué elige y qué proyecto de país elige”.

Respecto de la elección de quien la sucederá en la Presidencia, la jefa de Estado le pidió “a cada argentino que mire qué hizo cada uno de esos hombres” que se postulan a la presidencia “en los últimos años”, ya que “todos ellos son mayores de edad, nadie ha estado de licencia en la República Argentina en los últimos años, no sólo en los últimos cinco”. Por el contrario, agregó, “todos han tenido una vida política y empresarial porque hay de todo en la Argentina”.

CFK estuvo acompañada por la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; el secretario de Obras Públicas de la Nación, José Francisco López; el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta; y el intendente de El Calafate, Javier Belloni. Antes del acto, también dejó inaugurados, a través de videoconferencias, el Instituto Universitario de Medicina Reproductiva de la ciudad de Córdoba y la nueva sede de la empresa alimentaria Menoyo, ubicada en la localidad bonaerense de Munro.

Además, también a través de ese medio, la primera mandataria mantuvo una comunicación con el ministro del Interior y Transporte y precandidato presidencial del Frente para la Victoria, Florencio Randazzo, en la que dejaron inaugurado un Centro de Documentación Rápida en el microcentro porteño, que permitirá gestionar el DNI en 24 horas (ver aparte). Otro precandidato que tuvo su lugar fue el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, que corre por la Jefatura de Gobierno porteña: el motivo fue la nueva conexión directa entre Puerto Iguazó y El Calafate que brindará esa línea aérea, uniendo dos de los puntos turísticos más importantes del país.

Durante esa videoconferencia, la Presidenta destacó el crecimiento del turismo en esa región y recordó que mientras en 1937 El Calafate tenía unos 100 habitantes y recibía a 15 personas por año para visitar el glaciar, “hoy hay más de 20.000 habitantes y millones de turistas que visitan año a año” ese punto turístico. También elogió el trabajo del Renaper, que “agilizó la obtención de los DNI, articulando la adquisición de derechos de esta sociedad, porque con este nuevo sistema, el Ministerio del Interior salió a la calle a darles la identidad a ellos, a su familia, nuevos derechos” y expresó que “ésta es una política de identidad que recuerda a memoria, verdad y justicia”.

En ese sentido, la mandataria arengó: “Nos han bombardeado, no literalmente como en el pasado, pero sí con armas e instrumentos más sofisticados, a los gobiernos populares que han ampliado derechos, y esto no sólo ha pasado en la Argentina sino también en la región”, en referencia a los acontecimientos recientes en Brasil, Argentina y Venezuela. “Esos instrumentos son más imperceptibles, más letales y terminan atentando contra los derechos de millones de personas que han sido incluidas en los últimos años”, agregó.

CFK destacó que para contrarrestar eso se ha creado “una cultura empoderando a la gente de derechos”. Y hablándoles a “quienes integran este movimiento”, les pidió que “no les importen las críticas” porque “la historia tiene otros tiempos y el mayor logro de este gobierno es haber empoderado a una sociedad de derechos”. Por eso, destacó que “te podrán difamar, pero no te pueden hacer olvidar que con este gobierno si no tenías trabajo y jubilación, volviste a tenerlo”; “podrán hacerles creer a muchos jóvenes o a algunos que no es un buen gobierno, que soy mala, pero no van a poder convencerlos de que no podrán ir a una universidad cerca de su casa”; y “podrán convencer a algún dirigente sindical para que critiquen al modelo iniciado en 2003, pero no se podrá convencer a los trabajadores de que no tienen los mejores salarios y los mejores convenios colectivos de sus vidas”, concluyó.