El aumento en los precios de los alimentos, en especial de frutas y verduras, llevó a 321,70 pesos el monto que debió reunir una familia tipo durante octubre para satisfacer sus mínimas necesidades de alimentación. Debajo de ese nivel de ingresos, la familia es considerada indigente. La información fue proporcionada ayer por el Indec, que precisó que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) registró el mes pasado una suba de 2,1 por ciento. La noticia dio lugar a una polémica entre defensores de los consumidores, mayoristas frutihortícolas y el Gobierno, centrada en las responsabilidades de los empresarios y del Estado en la evolución de los precios.
La asociación Defensora de Usuarios y Consumidores (Deuco) reclamó una participación activa del Gobierno en la corrección de las distorsiones de precios. Pedro Busetti, titular de la entidad, remarcó que “en un mercado que no es competitivo, porque la oferta está altamente concentrada en pocos grupos económicos, que actúan de manera oligopólica y establecen acuerdos de precios, el Estado tiene que actuar como regulador”.
La Cámara Argentina de Mercados Frutihortícolas, que agrupa a los vendedores de esos alimentos, respondió a las críticas a través de un comunicado. Su principal argumento fue que “gran parte de los aumentos se debió a factores estacionales”. Y también protestó contra el Gobierno, al asegurar que “la producción y la comercialización están sometidas a una competencia desleal generada por las producciones y mercados ilegales, que escapan a todo control de sanidad alimentaria, calidad y responsabilidad impositiva”.
Si bien el costo de la CBA subió 2,1 por ciento en octubre, el resultado global del año muestra una caída del 1,5 por ciento, a raíz de la deflación de los meses anteriores. Para la misma familia tipo, el costo de la Canasta Básica Total (CBT) –que establece el límite de la pobreza y además de alimentos incorpora la compra y utilización de un grupo de bienes y servicios– fue estipulada en 704,58 pesos. En este caso, el alza fue del 1,6 por ciento respecto de septiembre. En el año registra el mismo comportamiento que la CBA y cayó 1,9 por ciento.
Para el caso de una familia compuesta por un matrimonio y un solo hijo, la CBA se ubicó en 254 pesos, mientras que la CBT fue de 556,3 pesos, según el Indec. Finalmente, el organismo presentó otro ejemplo, con un grupo familiar integrado por matrimonio y tres hijos, y el resultado fue de 349,8 pesos la CBA y de 766,1 pesos la CBT.
Durante octubre el índice de precios minoristas aumentó 0,6 por ciento, pero el rubro alimentos y bebidas –de donde se nutre la CBA– creció en promedio 1,5 por ciento. Dentro de los alimentos, las frutas aumentaron 16,6 por ciento y las verduras, 14,4 por ciento. Los cítricos mostraron un alza promedio de 28,1 por ciento, con aumentos significativos de 45,2 por ciento en el limón y de 14,3 por ciento en la naranja.