“Lo último que me pidió Todesca fue publicar los precios para abril, algo imposible cuando se tiene que hacer todo de cero. Este trabajo no puede ser menor a seis meses. Pesó más la urgencia política que la rigurosidad técnica”, dijo la funcionaria desplazada del Indec, Graciela Bevacqua. La técnica aseguró estar sorprendida y en situación de shock por la decisión de Todesca de correrla de su posición a sólo un mes y medio de asumir, al tiempo que mencionó que se enteró por un comunicado del organismo de que la habían desplazado. Aseguró que todavía le queda algo de esperanza de que se revea la medida. “Yo quiero creer que van a repensar y volver para atrás, que van a llamarme de nuevo para hacer las cosas bien. Si no es así. tener un índice nuevo en dos meses no es posible. En una consultora puede hacerse algo menos profesional pero no en el Indec. Yo estaba muy ilusionada con este proyecto”, aseguró.

En el día del anuncio de las nuevas autoridades del instituto, el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, había adelantado que el Indec empezaría a funcionar en forma autárquica para evitar que las necesidades del Poder Ejecutivo interfieran en el trabajo y la metodología de la entidad. Bevacqua, que estaba en el auditorio aplaudiendo la consigna, ahora criticó fuertemente al director del Indec por ponderar la urgencia política por sobra la robustez estadística. “Con Jorge (Todesca) empezó todo bien hasta que la urgencia política hizo que me presionará a mí. No sé si la política quería dos, tres o cinco meses para tener listos los indicadores. Para eso la única opción era traer los índices de San Luis o de la Ciudad de Buenos”, dijo.

La funcionaria desplazada resaltó que le resulta muy difícil de entender la decisión de correrla de sus funciones. “Todavía estoy de lo más sorprendida. Entré con gran ilusión. Se lo transmití a cada uno de los directores que casi que obligué a volver. Muchos estaban con salarios y posiciones mejores. E incluso otros no querían repetir cuestiones con los maltratadores. Pero logré que estén en el compromiso de hacer la transición y ahora me siento responsable por los que dejaron sus trabajos. Lo que ocurrió baja de un plumazo todas las expectativas positivas (de recuperar el Indec)”, dijo. Apuntó que le ocurrió por segunda vez algo que pensó que esta vez no iba a pasar. “Llegue a la oficina y me habían sacado todas mis cosas sin que yo pudiera ir a retirarlas personalmente. Y eso es realmente grave. Es una falta de respeto”, cerró.