Por R. D.

El proceso negociador para un acuerdo de asociación Mercosur-Unión Europea entró a partir de ayer en su fase final. Los representantes del bloque latinoamericano entregaron ayer su oferta de desgravación para las importaciones de origen europeo y de tratamiento a las inversiones. “Hemos realizado un sustancial incremento de nuestra oferta”, destacó Martín Redrado, secretario de Comercio Internacional, “elevando al 88 por ciento (del total de posiciones arancelarias) los productos incluidos en el programa de desgravación”. La Unión Europea había ofrecido anteriormente desgravar sus importaciones en el 98 por ciento de las posiciones, reservándose cada bloque una lista de productos sensibles sobre los que desean mantener cierta protección. Según fuentes oficiales argentinas, “para octubre, a más tardar, habrá acuerdo”.
El esquema a acordar es una desgravación paulatina de aranceles de cada parte en un proceso de diez años. En el caso del Mercosur, el “desarancelamiento” total de importaciones recién llegará en el décimo año para el 60 por ciento de las posiciones. La Unión Europea, en cambio, ofrecerá un ritmo más acelerado de desgravación. En su oferta mejorada, Brasil, Argentina y Uruguay incorporan concesiones en transporte marítimo internacional de pasajeros y de carga y en servicios auxiliares de transporte marítimo.
Entre los productos sensibles que el Mercosur se reserva, dejándolos fuera del arancelamiento, figuran los caños sin costura y metalmecánicos en los que, supuestamente, presentaría condiciones desventajosas de competitividad. La UE, en tanto, excluyó de su oferta de “desarancelamiento” fundamentalmente bienes agrícolas y algunos derivados, como leche en polvo.
Las expectativas del gobierno argentino es que este acuerdo, funcionando a pleno, le abra un mercado de 10 mil millones de dólares. “Es una clara demostración de que es posible hacer acuerdos comerciales de otro tipo con los países industriales, muy distintos del ALCA, tanto en sus aspectos políticos como económicos”, destacó una alta fuente del gobierno argentino. El mismo vocero subrayó que, como parte del mismo acuerdo, Argentina se beneficiará con un desembolso de asistencia técnica por parte de la UE para el equipamiento de aduanas. “La concreción de este acuerdo nos fortalece, políticamente, para pelear el ALCA”, aseguró.
En cuanto a las fechas, en Cancillería estiman que “si no se llega con un acuerdo de máximo alcance” para la semana próxima, cuando se realice el encuentro de Guadalajara, se seguirá negociando postergando el anuncio al 8 o 9 de julio, cuando se realice la próxima cumbre del Mercosur.