ECONOMíA
› TURISMO QUIRURGICO-TANGUERO PARA GENTE DISCRETA
Siliconas, tango y lo demás
› Por Julio Nudler
La compañía ofrece diversos combos a los norteamericanos. El más popular, según asegura, es un paquete turístico de siete días que abarca un implante de siliconas en los senos y lecciones privadas de tango y de español. Ya con sus expandidas mamas, la mujer gozará de una cena-tango en “la mundialmente famosa Esquina Carlos Gardel”. En cambio, lo que la empresa Plenitas Health & Leisure considera más adecuado para combinar con una angioplastia es un tour a Bariloche, en tanto una cirugía de nariz se articula mejor con un paseo por Buenos Aires. En todos los casos, tanto clínica como turísticamente el nivel del servicio es de excelencia, a la altura de Estados Unidos, según se promete. Pero con una ventaja: la calidez de la relación médico-paciente que es propia de los galenos argentinos, que se ocupa de resaltar Roberto Gawianski, máximo ejecutivo de la empresa, fundada en 2003, con una base en Buenos Aires y otra en Miami. El dólar a tres pesos ha debido de jugar cierto papel en todo esto.
Liposucción, agrandamiento de pechos, by pass gástrico, cardiología, odontología, oftalmología, cirugía plástica, todo puede combinarse con destinos turísticos como la Reina del Plata, las cataratas de Iguazú, Ushuaia, la Patagonia de Néstor y Cristina, Mendoza o Jujuy. Los turistas-pacientes, que no pacientes turistas, disfrutarán de las siguientes atenciones: asistencia personal bilingüe, consulta con el doctor previa al viaje, visitas del cirujano luego de la operación, recuperación postratamiento, todos los arreglos para el viaje y el hospedaje, y paquetes turísticos completos, incluyendo opciones a gusto del cliente.
Cinthia Gawianski destaca que, pese a su nivel de excelencia, los costos médicos de la Argentina son “muy competitivos debido a la situación económica del país y al tipo de cambio”. La idea es combinar un tratamiento médico de primer nivel con un ocio a todo lujo para formar así un paquete único pero asequible de salud y vacación, con el más suntuoso alojamiento, “asistentes personales y otras amenidades”. Usted me entiende.
Esta integración de salud y placer, que incluye microtrasplante capilar pelo x pelo, garantiza privacidad. Es decir, la ventaja de someterse a estos retoques a resguardo de la curiosidad ajena, para lo cual la remota Argentina ofrece condiciones ideales. Pero también se ofrece la solución a menor costo de algunos problemas penosos, como la internación de pacientes psiquiátricos crónicos o la internación geriátrica. Adicciones, obesidad, várices, todo puede resolverse a precios accesibles en las pampas.
Otra manifestación, sin duda, del mundo globalizado y de la deslocalización. La Argentina, como LCC, o país de bajos costos, puede captar su modesta parte en el negocio.
La cuestión es “ofrecer Argentina” como ningún otro lo hace, englobando diferentes propósitos, médicos y de esparcimiento, para que el viajero “se embarque en la mejora de su persona a través de cirugías cosméticas y otras, autodescubriéndose a través de las maravillas de la Argentina”.