ECONOMíA
› DUHALDE FIRMO EL DECRETO DEL CORRALITO VERSION LAVAGNA
La opción: reprogramado o embonado
En Olivos, luego de obtener el respaldo de diputados y senadores del PJ, el Presidente avaló el nuevo corralito. Hoy se dan detalles.
Después de cuarenta días de trabajo y discusiones, Roberto Lavagna dará a conocer hoy el decreto que vuelve a cambiar las reglas del corralito y abre las puertas a la reestructuración del sistema bancario. El Gobierno tuvo enormes dificultades para llegar a este final. En el medio renunció Jorge Remes Lenicov cuando el Congreso rechazó el Plan Bonex, y el propio Lavagna tuvo que descartar su primera idea ante la falta de apoyo de los bancos. Pero, finalmente, Eduardo Duhalde le puso la firma al decreto ayer. Esa norma, junto a la derogación de la Ley de Subversión Económica y la firma del Pacto Fiscal por parte de Felipe Solá, termina de despejar los requisitos planteados por el Fondo para llegar a un acuerdo (ver página 11).
El esquema que diseñó el equipo económico para la salida del corralito ofrece distintas alternativas para los titulares de cajas de ahorro y cuentas corrientes, y otras tantas –algunas se repiten– para los ahorristas en plazo fijo. Todas ellas fueron revisadas ayer por la tarde en una reunión en la quinta de Olivos entre Duhalde, Lavagna y los jefes de los bloques de diputados y senadores justicialistas. El ministro de Economía hizo una exposición del contenido del decreto de necesidad y urgencia y solicitó una rápida ratificación del Congreso la próxima semana. Los puntos salientes del decreto que Lavagna expondrá este mediodía son los siguientes:
- Cuentas a la vista: sus titulares pueden elegir entre dejar el dinero en el banco y retirarlo con las restricciones actuales –1200 pesos mensuales y 300 semanales– o solicitar un bono a tres años. El título será en dólares, pero para adquirirlo hay que participar de una licitación que ganará quien ofrezca un valor más alto por el dólar.
- Bonos: además de los titulares de cuentas a la vista, podrán optar por el bono en dólares a 3 años aquellos ahorristas en plazo fijo cuyo depósito no supere los 10 mil pesos después de la pesificación. Para el resto de los propietarios de plazos fijos en dólares, la opción de tomar un bono es la de un título a 10 años en dólares a 1,40. Y aquellos que originalmente tenían depósitos en pesos podrán elegir un bono en pesos a 5 años. Todos los bonos pagan intereses semestralmente. Los de dólares se ajustan por tasa Libo y el de pesos paga un interés del 2 por ciento anual más la indexación del CER. El plazo para ejercer la opción por los bonos vence después de 30 días de la publicación del decreto en el Boletín Oficial.
- Exceptuados: los mayores de 75 años, los enfermos y aquellos que cobraron indemnizaciones pueden elegir un bono en dólares a 3 años, a 1,40 peso por dólar.
- Certificados: servirán para la compra de casas en construcción, autos, acciones y cuotas parte de fondos de inversión. También se podrán vender en el mercado. Esta opción es para quienes tenían plazos fijos. Estos también pueden dejar el dinero en el banco y esperar su devolución de acuerdo a la reprogramación establecida en enero pasado.
Duhalde le puso la firma al decreto durante la reunión con los legisladores. Otro capítulo de ese encuentro estuvo dedicado a estudiar alternativas para que los exportadores tengan mayor presión para liquidar divisas. El Congreso podría avanzar con la sanción de un proyecto de ley de los diputados Jorge Obeid y José María Díaz Bancalari, que obliga a los exportadores a liquidar sus divisas en un plazo máximo de diez días después el envío de las mercaderías.