El Banco Central hizo ayer algunas aclaraciones respecto del funcionamiento del corralito. A diferencia de lo que se desprendía de la reglamentación sobre cajas de ahorro en dólares entregada anteayer, la autoridad monetaria precisó que “podrán extraerse hasta 500 dólares en efectivo por mes” de esas cuentas. En principio, sólo les era posible obtener billetes verdes a los titulares de cuentas corrientes –también hasta un máximo de 500 mensuales–, pero ahora se puntualizó que lo mismo rige para las cajas de ahorro en esa moneda.
Por otra parte, se estableció que la posibilidad de pasar a pesos –a la paridad de 1,40 por dólar– los depósitos en cuenta corriente en dólares se extiende a los autónomos. Otra resolución del Banco Central confirmó la pesificación de los saldos de tarjetas de crédito. “Los saldos pendientes de pago en dólares correspondientes a liquidaciones vencidas con anterioridad al 6 de enero y los importes correspondientes a planes de cuotas pendientes de liquidación, serán convertidos a pesos a la paridad uno a uno”, dice la norma. Esto significa que todos los consumos y deudas en dólares con la tarjeta previos al 6 de enero se pasan a moneda nacional. Los consumos tienen que haber sido realizados en el país. Finalmente, de esa fecha en adelante, las operaciones en el país que se hagan con el plástico serán expresadas en pesos.
En cuanto a la pesificación de deudas por créditos hipotecarios, se confirmó que será de hasta 100 mil dólares para los contraídos para “adquisición o construcción de vivienda única y familiar”. En tanto, se pesifican los préstamos para refacción de hasta 30 mil dólares. En el caso de los créditos prendarios, se pesifican los de hasta 15 mil dólares. Los préstamos personales, hasta 10 mil dólares. Y los concedidos a las pymes, hasta 100 mil dólares.