Un grupo de 470 argentinos varados en España por la caída de Air Madrid logró regresar al país con un vuelo de otra compañía. Ese viaje marcó el inicio del plan de emergencia para miles de personas afectadas.
El primer grupo de argentinos varados en España por la caída de Air Madrid llegó ayer a Buenos Aires, en un vuelo de la compañía Pullmantur, que gestiona Iberia. El vuelo fue dispuesto por el Ministerio de Fomento de España, que tenía previsto enviar otro avión esta madrugada. Con ese vuelo el gobierno de aquel país puso en marcha su plan de emergencia para llevar a miles de pasajeros a sus destinos. El mismo organismo concretó ayer la suspensión de la licencia y el certificado de operador aéreo de la compañía por los incumplimientos en su plan de medidas correctivas.
La Dirección General de Aviación Civil española insistió en su recomendación a los viajeros que tienen pasajes de la empresa que deben viajar en los vuelos de emergencia antes del 21 de diciembre, ya que el dispositivo de urgencia puesto en marcha sólo estará vigente hasta esa fecha. La compañía había vendido 300 mil pasajes hasta febrero. Dentro de ese grupo, hay más de 5000 argentinos afectados.
Por su parte, la Secretaría de Transporte emitió un comunicado donde remarcó que busca facilitar las autorizaciones para permitir el traslado de pasajeros damnificados por la suspensión de operaciones de la aerolínea española. “Frente a los anuncios de la empresa Air Madrid de cancelación de todos sus vuelos programados, la Secretaría se encuentra abocada a facilitar las autorizaciones de excepción para permitir el transporte alternativo a través de otras empresas tanto españolas como argentinas, de aquellos pasajeros que se encuentren afectados por esta situación”, señaló el comunicado.
La Dirección de Aviación Civil española explicó que la decisión fue tomada “con total independencia de la conducta unilateral y absolutamente irresponsable de la compañía”. Además de suspender la autorización de vuelo de la aerolínea, el Ministerio de Fomento español diseñó un plan de emergencia de seis días de duración, durante los que operarán seis aviones alquilados para hacer frente a los casos más urgentes.
Por su parte, Air Madrid habilitó en España un número de teléfono (34 902-515251) y una dirección de correo electrónico ([email protected]) “para reclamar la devolución del importe de los billetes”.
Las autoridades españolas dijeron que no tienen capacidad para atender a los pasajeros que inician el viaje, a los que pidió que reclamen a Air Madrid, como lo hará el gobierno español, que tiene previsto demandar a la compañía por los más de 5 millones de euros que costará el operativo de emergencia. También recurrirá a los Tribunales la aerolínea suspendida, que acusa al Ministerio de Fomento de hacer un uso “arbitrario e injusto” de sus atribuciones y de haber creado las condiciones de alarma que han dañado su credibilidad al “especular” con la suspensión de la licencia.
Antenoche, la Cancillería argentina recibió al embajador de España, Carmelo Angulo Barturen. “Se manifestó la preocupación del gobierno argentino por la situación humanitaria planteada” por la suspensión, informó esa cartera en un comunicado, tras lo cual indicó que “los funcionarios de ambos países intercambiaron información y convinieron en la necesidad de coordinar actividades”. “El embajador español manifestó que se están estudiando diversas posibilidades en la búsqueda de medidas destinadas a hacer frente a la situación creada, y ambas partes se comprometieron a mantenerse en contacto permanente”, agregó.
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