Las empresas que prestan servicios de transporte de caudales, de seguridad y de limpieza estarán obligadas a emitir, a partir de octubre, facturas electrónicas, anunció ayer la Administración Federal de Ingresos Públicos. “La implementación del uso de la factura electrónica no sólo representa una ventaja en el costo transaccional de las empresas, sino que, además, es un gran avance contra la factura apócrifa”, indicó el subdirector General de Fiscalizaciones, Marcelo Costa.

La contratación de servicios a terceros por parte de las grandes empresas es una de las formas en las que suele darse un alto grado de irregularidad tanto en el cumplimiento impositivo como previsional. Tanto por la sobrefacturación con la que las empresas “dibujan” gastos para bajar sus propias obligaciones impositivas, como por el escaso control que existe sobre las empresas supuestamente prestadoras de los servicios. En algunos casos, se trata de empresas fantasma o controladas por las propias firmas que las contratan. Según la estimación de la AFIP, a través de este mecanismo se sumarán alrededor de 200 empresas al régimen de factura electrónica, que permite el monitoreo directo de los contribuyentes sobre una base de datos. La obligación abarca a la emisión de todas las facturas A (en las cuales se discrimina el IVA) y las facturas B que superen un monto de 10.000 pesos.

“Las empresas que transportan caudales, a partir de la implementación de la factura electrónica, ingresarán en un circuito de controles que permitirá verificar quiénes contratan estos servicios, quién mueve fondos en efectivo”, indicó Costa. La AFIP quiere avanzar rápidamente en la implementación de esta modalidad, y antes de fin de año “se incorporarán otros tres rubros de servicios”, mientras que durante el primer trimestre del año que viene se apuntará directamente a las cadenas de valor, incorporando a los proveedores de los exportadores.

A partir de enero de 2006, cuando entró en vigencia la emisión opcional de facturas electrónicas, se incorporaron en su mayoría empresas prestadoras de servicios vinculados con Internet y televisión por cable. Ante la escasa adhesión de la emisión opcional, un año después se estableció la obligatoriedad de inscripción en el régimen para aquellos sujetos prestadores de servicios de Internet, TV por cable, medicina prepaga y telefonía celular. En total, se encuentran adheridas al régimen 303 empresas, y se estima que, con la incorporación de estas tres nuevas categorías, se superarán las 500.