Eduardo Duhalde ya perdió las esperanzas de rubricar un acuerdo definitivo con el Fondo Monetario, y admitió que se sentiría satisfecho en caso de llegar aunque más no sea a un “acuerdo provisorio”, que le evite una sangría de reservas del Banco Central. Sobre los próximos vencimientos, señaló que “todavía no hay una decisión tomada ya que esperamos llegar a un acuerdo”. Arriesgó que éste podría firmarse “entre noviembre y diciembre”. Y aunque señaló que “sería bueno para la economía” recuperar los pagos que se hicieron durante el año a los organismos internacionales –unos 4100 millones de dólares–, el jefe de Estado admitió que el acuerdo global lo firmará el próximo Presidente.
Al igual que el ministro Roberto Lavagna, el primer mandatario hizo declaraciones a periodistas de medios extranjeros. Ayer recibió a las cadenas de televisión Bandeirantes (Brasil) y SIC (Portugal). Frente a los periodistas, Duhalde juzgó que el Fondo llegará a un acuerdo definitivo con el próximo presidente, ya que estará en la presidencia por cuatro años. No obstante, destacó que (en el FMI) “hay buena fe; son conscientes que necesitamos un acuerdo provisorio. Si no –advirtió–, las nuevas autoridades van a tener muchos dificultades”.
“Estamos procurando llegar a un acuerdo y tengo la sensación de que lo vamos a lograr. Hay conciencia que debemos llegar a un acuerdo y debe ser rápido”, destacó en otro pasaje de la entrevista. Sin entrar en demasiados detalles, el jefe de Estado declaró que frente a los inminentes vencimientos de la deuda con los organismos “necesitamos reprogramar la deuda, pero también precisamos un tipo de ayuda del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial (BM)”.