Diputados del interbloque que conforman ARI, Frente Grande, socialistas, PI y Polo Social inauguraron ayer en la Cámara baja la primera de una serie de tres jornadas para discutir el Presupuesto con participación popular y de organizaciones sociales. Elisa Carrió calificó de “mentiroso” el proyecto de gastos y recursos para el 2002 que envió el Ejecutivo al Congreso, ya que estimó que reitera conceptos de presupuestos anteriores y carece de medidas “que apunten a la reactivación”. A la vez, el Gobierno debió resignar la intención de aprobar mañana el Presupuesto 2002 en Diputados, como consecuencia de la resistencia generada en el interior del PJ por los recortes previstos. Los legisladores peronistas que integran la Comisión de Presupuesto y Hacienda rechazaron convalidar el dictamen del Presupuesto sin contar antes con el visto bueno del bloque. La mayoría de las modificaciones en estudio apuntan hacia una flexibilización de la suspensión de los beneficios de promoción regional que preveía el texto original.