El ministro de Planificación, Julio De Vido, convocó ayer a los ciudadanos que quieran dar de baja el subsidio a la luz, el gas y el agua a hacerlo a través de la página web del ministerio o de una línea gratuita 0800 que puso a disposición el Gobierno. El funcionario aseguró además que los recursos que el Estado ahorre por la eliminación de esos beneficios “irán íntegramente a financiar obras de infraestructura”.

En 2003, el gobierno nacional resolvió subsidiar los servicios públicos y se hizo cargo de ciertos componentes de la tarifa, reduciendo sustancialmente el monto final que abonaba el usuario. A partir de ahora, la intención oficial es avanzar con una personalización de los subsidios para que lleguen solamente a aquellos que realmente los necesitan. “Los subsidios han sido una herramienta excelente para que la Argentina saliera de ese encierro en el cual estaba en el año 2001/2002, pero llegó una etapa de sintonía fina, tal cual marcó ayer (por el martes) la Presidenta en su discurso, en la que hay que reorientar los subsidios para mejorar la equidad y la distribución del ingreso e incrementar la competitividad de la economía”, afirmó De Vido en declaraciones radiales.

Igual dejó en claro que quienes opten por resignar el beneficio seguirán pagando menos que lo que abonen por el mismo servicio ciudadanos de otros países de la región. “El valor sin subsidio va a ser en todos los casos inferior al de los países limítrofes”, afirmó el ministro, quien subrayó que por esos servicios “hay zonas del conurbano bonaerense que pagan menos que el resto de la provincia”.

“Los valores actuales dan lugar a excesos como los casos de gente que habiendo 30 grados de temperatura mantiene la pileta climatizada”, agregó De Vido. Luego destacó la importancia de “hacer un uso inteligente de los recursos, que no son renovables, cualquier derroche que hacemos es gas, luz y agua que les estamos negando a nuestros nietos, a quienes nos sucedan”. Por ello consideró que la discusión sobre la eliminación de los subsidios “va a ayudar a controlar” esos consumos injustificados.

Con la primera etapa de baja voluntaria del subsidio, el Gobierno busca difundir la iniciativa y mostrar el consenso que tiene entre numerosos referentes. Luego vendrá la etapa en que aquellos usuarios que aún no hayan optado tengan que responder la declaración jurada y el Gobierno decidirá qué hacer con los que hayan decidido conservar el beneficio a partir del análisis de su situación económica.