“Es mentira lo que dicen algunos lenguaraces economistas pagados por esos propios bancos y consultoras, que son inversores”, señaló ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en referencia a los fondos buitre. Estos fondos alegan haber comprado títulos públicos argentinos en buena fe a escasos días del default e, incluso, varias semanas después de que se declarara la cesación de pagos. En referencia a NML Capital, de Paul Singer, que es el que pidió el embargo de la Fragata Libertad en Ghana, la jefa de Estado recordó que “compró papeles de la deuda del ’94, que no es deuda de este gobierno, por cinco pesos y se negó a ingresar en las dos reestructuraciones de deuda”. Cristina dedicó buena parte de su discurso durante la inauguración de una planta de laminados en Santa Fe a responderles. Eligió para ello las palabras que utilizó el ex presidente Néstor Kirchner el 1º de marzo de 2004, en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso: “No pagaremos deudas a costa del hambre y de la exclusión de millones de argentinos generando más pobreza y aumento de la conflictividad social”.

NML Capital obtuvo un fallo favorable de la Justicia de Ghana y otro en Nueva York por supuesta discriminación del país en el tratamiento a los bonistas (ver aparte). Su presidente, Paul Singer, intentó a través de distintos medios periodísticos convencer de que fue vulnerada su buena voluntad en la compra de bonos, como una manera de justificar la persistencia en atacar al país. “Escuchaba a nuestro canciller relatar las gestiones para liberar la fragata. Son esos fondos buitre que no quisieron ingresar en la reestructuración de deuda de 2005 ni de 2010”, remarcó la Presidenta desde Villa Constitución. Tras lo cual deslizó una crítica sobre la complicidad que evidencian ciertos analistas locales: “Algunos parece que se pusieran contentos en la República Argentina” con el embargo.

El cruce entre el país y esos fondos buitre data de la misma declaración de default, el 23 de diciembre de 2001, momento en que comenzaron a accionar para cobrar la totalidad de sus tenencias. CFK citó al ex presidente Kirchner en un discurso de hace ocho años, como muestra de la coherencia de la posición del gobierno de entonces y la que mantendrá ahora frente a estos reclamos. “Cuando las ideas, los proyectos y la interpretación que uno hace del mundo y de lo que pasa es correcta, resiste el paso del tiempo”, aseguró la Presidenta, y leyó parte de ese discurso en el Congreso, en el que se refirió a “los llamados fondos buitre, que junto a los intereses financieros más recalcitrantes e insaciables intentan lucrar con la difícil situación ejecutando acciones mediáticas y espectaculares”. “Parece que fuera un discurso del día de ayer”, se interrumpió CFK en la lectura.

Prosiguió con las palabras de Néstor Kirchner: “Destinados al fracaso para lograr sus fines, les cabrá entender la firmeza de las posturas nacionales”, y continuó refiriéndose al momento actual. “Queda claro que no existe margen para recurrir a ajustes ni al incremento del endeudamiento. Por eso también cuidamos las divisas que necesitamos para las importaciones, para el turismo, para pagar la deuda de los privados y también para pagar la deuda, que otros contrajeron en los ’90 y durante la dictadura en adelante.” “‘Tenemos la certeza de que recibiremos una y mil presiones, sabemos que nos pondrán obstáculos que deberemos superar, pero sabemos el inmenso apoyo que nuestra defensa de los intereses nacionales tiene en la gran mayoría de nuestro pueblo; no vamos a aflojar.’ Eso decía Néstor Kirchner y eso dice esta presidenta, ocho años más tarde”, continuó relatando Cristina.

El canje se llevó a cabo al año siguiente de este discurso y luego de que en diciembre de ese año se anunciara la cancelación de la deuda con el Fondo Monetario. “‘Creciendo, nuestra economía mejorará nuestra capacidad de pago’”, señalaba entonces el ex presidente. “Este discurso, que si yo lo hubiera dicho habría sido exacto para determinadas situaciones (actuales), revela la coherencia y la consistencia de un planteo”, dijo la jefa de Estado.