Siguen difundiéndose indicadores que muestran la profunda depresión de la economía. Ayer se conoció que el consumo global de servicios públicos en febrero cayó un 14,2 por ciento respecto de igual mes del año pasado y de 2,3 por ciento con relación a enero, de acuerdo con la medición desestacionalizada, según un informe divulgado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos. Esa reducción resultó la más pronunciada desde junio de 2001 cuando el indicador comenzó una tendencia declinante.
El resultado negativo de ese indicador es consecuencia de caídas generalizadas en todos los rubros relevados, salvo en las llamadas internacionales de salida, en los vehículos que transitaron por las rutas de Buenos Aires, en agua entregada a la red y en carga del servicio ferroviario, en donde hubo mejoras de 14,5 por ciento, 8 por ciento, 2,4 por ciento y 2 por ciento, respectivamente.
En el sector energético hubo una disminución de 7,5 por ciento en la generación, mientras que la producción se mantuvo estable. El transporte de pasajeros en ferrocarriles urbanos disminuyó 19,4 por ciento, mientras que los interurbanos sufrieron una abrupta baja de 52,7 por ciento. En tanto, en el servicio de subterráneos se detectó una declinación de 8,6 por ciento. En tanto, en el transporte automotor se produjo una disminución de 16,3 por ciento.
Por su parte, el transporte de carga en el servicio de aeronavegación se registró una caída de 35,8 por ciento, con una retracción de 17,5 por ciento en el servicio de cabotaje y de 38,3 por ciento en el internacional. En el servicio telefónico las llamadas urbanas mantuvieron su nivel respecto de febrero de 2002, con una variación negativa de sólo 0,1 por ciento, mientras que las llamadas interurbanas se redujeron 13,3 por ciento. Con relación a la telefonía celular se observó una disminución de 3,3 por ciento.