La economía brasileña crecería este año un 5,2 por ciento, la mayor tasa de expansión del PBI desde 1994. Los datos surgen de un estudio realizado por el Instituto Estatal de Pesquisa Económica Aplicada (IPEA), que a principios de año pronostica un crecimiento de sólo el 3,5 por ciento. Paulo Levy, director de Estudios Macroeconómicos del IPEA, conjeturó para el 2005 que el crecimiento será algo menor: del 3,8 por ciento. Y recomendó “ser cautos para el próximo año porque el mundo está atravesando un momento complicado por la desvalorización del dólar frente a otras monedas”.
Por otro lado, según un informe de la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (Unctad), las empresas brasileñas, privadas y estatales, están batiendo records de inversión en el exterior. En el 2004 invirtieron 9 mil millones de dólares fuera de Brasil, con lo cual las empresas de ese origen están hoy entre los “cinco principales inversores en los países en desarrollo”. Para fines de este año, la Unctad calcula que las inversiones brasileñas acumuladas en el extranjero alcanzarán los 66 mil millones de dólares. Un dato que confirma que Brasil va en camino de ser una potencia económica a nivel mundial.