El fomento de la inversión y la lucha contra la inflación serán los principales desafíos que enfrentará Felisa Miceli durante su gestión como ministra de Economía, según opinaron ayer los industriales más importantes del país En un clima atípico por el desplazamiento de Roberto Lavagna del Palacio de Hacienda, la jornada de clausura de la 11ma. Conferencia Anual de la Unión Industrial Argentina sirvió para que los ejecutivos de las principales empresas manufactureras ordenaran un poco sus ideas luego de la “sorpresa” de ayer, y discutieran la necesidad de repatriar los capitales fugados al exterior y canalizar los fondos de las AFJP hacia la inversión productiva.
Pero como era previsible, los pasillos del edificio de la Bolsa rosarina -donde se realiza el encuentro– siguieron plagados de comentarios y especulaciones sobre el rumbo que seguirá Miceli: “Creo que hoy no se vislumbra ningún cambio. La economía argentina se encuentra en un rumbo de crecimiento y creo que va a seguir así”, resumió el presidente de Arcor y titular de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), Luis Pagani. “Bienvenido que la ministra venga del Banco Nación, que es una entidad que provee financiamiento de largo plazo, porque eso es lo que necesitamos para invertir”, agregó.
La alusión del número uno de AEA y hombre fuerte de la UIA a las necesidades de financiamiento de la industria reforzó el contenido del seminario que convocó la central fabril en Rosario, donde el ex ministro de Economía Aldo Ferrer consideró ayer como “fundamental” la creación de una banca de desarrollo que otorgue préstamos a plazos mayores que la banca tradicional.
El presidente de la filial argentina de Unilever, Luis Mario Castro, coincidió en que “lo que necesitamos es movilizar la inversión, y llevar el ahorro interno a la inversión”, aunque también destacó la importancia de mejorar la infraestructura, la educación y el sistema tributario argentino, como ya recomendó en varias oportunidades la influyente AEA.
Para Castro, sin embargo, la idea de una banca de fomento debe ser tomada con cuidado, vigilando la recobrabilidad de los créditos, “porque la historia del Banade no fue totalmente feliz”. El Banco Nacional de Desarrollo cerró sus puertas a mediados de los años ochenta, con su balance contable hundido en los números rojos por los préstamos impagos de muchos industriales locales, varios de los cuales militan aún hoy en la UIA.
A la par del fomento a la inversión, la inflación surgió como la gran preocupación de los industriales que viajaron a Rosario: “El problema principal que hay que atacar es el nivel de inflación, porque no hay que olvidarse de que la mitad de la población está bajo la línea de pobreza, y a ellos los afecta más que a nadie”, destacó Pagani. El presidente de Toyota Argentina, Tomio Katsuta, opinó por su parte que “la inflación tiene relación con la actividad”, pero destacó que “acá hay muy buen personal y proveedores”, y se declaró “muy contento de trabajar en este país, que tiene mucha capacidad”.
El titular de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi, se sumó al coro de elogios hacia la designada ministra: “Soy profundamente optimista de que los números macro sean cada vez mejores. Yo siempre he respetado al ministro Lavagna, pero creo que siempre la política económica la ha determinado el Presidente, así que confío en que él con la persona que tenga en el Ministerio de Economía pueda continuar la tarea que realizó en principio Lavagna y ahora realizará seguramente la ministra Miceli”, dijo el directivo bursátil. “Yo le tengo mucho cariño. Es una persona con códigos y con muchos conocimientos sobre el tema, y que conoce muy bien el mercado de capitales”, calificó Gabbi.
El dueño de Ledesma, Luis María Blaquier, dijo que “lo importante por lo que estamos leyendo es que va a haber continuidad en la misma línea”, y añadió que “lo que esperamos es ver los frutos para conocer el árbol”. “Lo que esperamos que se mantenga es el crecimiento. El crecimiento es como untermómetro, que si anda bien implica que hay disciplina fiscal, cumplimiento de las leyes laborales y un marco adecuado para invertir”, opinó el empresario.