A cuatro días de las elecciones, el gobierno paraguayo denunció la presencia de agitadores extranjeros vinculados con el principal candidato opositor, Fernando Lugo. La acusación se produce en momentos en que empiezan a llegar simpatizantes de la región para apoyar al presidenciable favorito en los sondeos. “Agitadores de Venezuela y Ecuador vinieron y planean quemar propiedades. El responsable de la muerte va a ser Lugo y su camarilla de delincuentes y secuestradores”, señaló el mandatario Nicanor Duarte Frutos el martes pasado. Desde la oposición, la centroizquierdista Alianza Patriótica para el Cambio (APC), que postula al ex obispo Lugo, desmintió la versión. “Es una campaña de miedo. La única alternativa que tienen para ganar es aplicar el estado de sitio”, dijo a Página/12 Miguel López Perito, uno de los jefes de campaña del ex religioso.

Lejos de enfriar el ambiente, el gobierno paraguayo salió ayer a respaldar la ofensiva que el presidente inició esta semana contra la oposición. “Existe una preocupación con la presencia inusual de tantos extranjeros acá”, dijo el ministro de Interior, Libio Florentín, a la prensa. “Como dice el presidente, responsabilizamos a los candidatos de la Lista 6”, dijo en alusión a la fórmula encabezada por Lugo para los comicios presidenciales del 20 de abril.

El día anterior, el presidente Duarte Frutos dijo que no iba a permitir la intromisión de ningún extranjero en la lucha democrática interna. “El gobierno se va a reservar las medidas que correspondan para evitar que generen violencia en el Paraguay”, aseguró en un acto público realizado en Caaguazú, al este de Asunción. El mandatario incluso llegó a denunciar una conspiración luego de las elecciones, informó el diario paraguayo ABC. “Los grupos subversivos de San Pedro afines a Lugo está organizados para desatar una ola de violencia inmediatamente después de la victoria del Partido Colorado”, dijo, dando por hecho el triunfo de su lista.

En medio de las alarmas encendidas por el gobierno, el comandante de las Fueras Armadas, general Bernardino Soto Estigarribia, anunció ayer el acuartelamiento de sus militares. “Manejamos muchas informaciones sobre supuestos hechos violentos que podrían darse el día de las elecciones”, dijo al diario local Ultima Hora. No obstante, el alto mando castrense aseguró que las FF.AA. respetarán los resultados. “Es claro y contundente que las Fuerzas Armadas están para defender la institucionalidad y no toman partido por ningún sector político”, afirmó a la prensa.

En tanto, referentes de la oposición consideraron que las acusaciones del gobierno son parte de una “campaña sucia”. “Se les están yendo de las manos sesenta años de gobierno”, dijo a este diario Gerardo Rolón Pose, el presidente del Partido Demócrata Cristiano (PDC). Aunque su peso político es limitado, el PDC es la “chapa” que Lugo eligió para postularse como presidente, dentro de la Alianza que lidera, dijo Pose. Tanto él como el entorno de Lugo no desconocen la relación que tienen con partidos de otros países, que ya empezaron a viajar a Paraguay para acompañar al ex obispo.

Entre ellos, destaca el Frente Amplio de Uruguay, el Partido de los Trabajadores de Brasil y la Democracia Cristiana de Chile. De Argentina, se espera que viajen el Frente para la Victoria, la UCR, el Partido Socialista, el Partido Comunista, Hebe de Bonafini y movimientos sociales, dijo Celso Chamorro, de la APC, en Buenos Aires. El primer tren ya salió ayer a la tarde.

Informe: Juan Manuel Barca.