Execrable, cobarde, inaceptable, repudiable, fueron los calificativos de algunas de las cancillerías latinoamericanas ante los ataques en Noruega. Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo ayer que el ataque era un recordatorio de que el terrorismo es una amenaza que se cierne sobre todos los países. La OTAN y la Unión Europea repudiaron el atentado. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no tardó en responder a los ataques de ayer. “Esto es un recordatorio de que la comunidad internacional toda tiene la obligación de prevenir que sucedan este tipo de hechos terroristas. Debemos cooperar juntos para que no ocurra este tipo de actos horrorosos”, dijo Obama.

La reacción sudamericana fue similar. La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, le envió ayer un mensaje de solidaridad al premier de Noruega, Jens Stoltenberg. “Con profunda consternación recibí la noticia de los atentados ocurridos hoy en Noruega”, dijo Rousseff en el mensaje.

“Ante los ataques que enlutan al pueblo de Noruega, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador expresa su solidaridad y sus condolencias con el gobierno y las familias de las víctimas”, señaló la declaración. “El gobierno ecuatoriano condena estos hechos violentos y sin precedentes en ese país y ratifica la necesidad de las naciones de seguir trabajando por la paz”, añadió el comunicado.

“El gobierno colombiano condena en los términos más enérgicos el presunto ataque terrorista perpetrado en Oslo, en inmediaciones de la sede de gobierno del primer ministro noruego, Jens Stoltenberg”, dijo el comunicado de la Cancillería colombiana, agregando que “transmite sus condolencias a las víctimas de este execrable acto, así como al pueblo y al gobierno de Noruega”.

Por su parte, Chile condenó la explosión ocurrida ayer cerca de la sede del gobierno noruego en Oslo. “El gobierno de Chile lamenta la explosión ocurrida hoy en el centro de Oslo, Noruega, que ha causado muertos y numerosos heridos, además de significativos daños materiales. Este hecho constituye una expresión de violencia inaceptable que Chile condena enérgicamente”, indicó la Cancillería. “El gobierno formula votos fervientes para que Noruega se recupere prontamente de esta dolorosa tragedia”, cierra la misiva. A su turno, la administración de Alvaro Colom, presidente de Guatemala, se refirió al doble ataque como “los atroces hechos acaecidos este viernes en la ciudad de Oslo, capital del reino de Noruega. Confiamos en prontas acciones de las entidades gubernamentales noruegas para castigar, con todo el rigor de la ley, a los perpetradores de tan cobarde acto terrorista”, señala el comunicado guatemalteco.

“Costa Rica desea manifestar al pueblo y gobierno de Noruega su profundo pesar por estos repudiables actos y, asimismo, expresa sus más sinceras condolencias a las familias de las víctimas y personas heridas”, dijo la Cancillería de ese país. “Tales actos criminales deben ser condenados por la comunidad internacional, dada su naturaleza destructiva y perversa, y que se ensañan contra víctimas inocentes”, cerró el comunicado.

Del otro lado del Atlántico, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, se mostró sorprendido por la tragedia que sacudió al país nórdico. “Un ataque de esta magnitud no es algo que se espera que suceda en Noruega”, dijo el alto funcionario. “Estas acciones de semejante cobardía no tienen ninguna justificación”, dijo el titular del Consejo, Herman van Rompuy. El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, condenó el atentado y lo calificó como un horroroso acto de violencia, en tanto que le extendió sus condolencias a las familias afectadas. El titular del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, dijo que lo último que merece Noruega es un atentado en su propio territorio, ya que ese país es conocido por fomentar la paz en el mundo. “Este impresionante ataque no tiene precedente”, afirmó la OTAN, de la cual Noruega forma parte.