El Reino Unido reiteró su negativa a dialogar sobre la soberanía de Malvinas y sugirió al gobierno argentino negociar con los “representantes democráticamente electos del pueblo de las islas Falkland” temas como la pesca o los vuelos al continente. El rechazo surge de una carta firmada por una de las ocho representantes de la Asamblea Legislativa de las Islas Falkland, Sharon Halford, que el Foreing Office envió a la embajadora en Londres, Alicia Castro. La misiva no rechaza la propuesta de establecer vuelos regulares operados por Aerolíneas Argentinas, anunciada por la presidenta Cristina Fernández el 1º de marzo, aunque condiciona el diálogo a que se “revoque la injustificada e ilegítima prohibición de sobrevuelo de la Argentina para los vuelos charter”. “Los intentos del gobierno de la presidenta Kirchner de forzarnos a renunciar a nuestro derecho absoluto de determinar nuestro propio futuro político, no sólo están condenados a fracasar, sino que agravarán la tensión”, advierte.

La carta, fechada el 6 de junio y dada a conocer ayer, está dirigida al director de Territorios de Ultramar de la cancillería británica, Colin Roberts, con pedido de reenvío a la embajadora Castro. Es “la posición del gobierno de las islas Falkland”, remarca. En la primera parte destaca que “en el pasado” hubo conversaciones y acuerdos con la Argentina y que “nos complacería recuperar ese espíritu de cooperación”. Adjudican la falta de diálogo a la “creciente hostilidad” y a que el gobierno argentino “busca activamente dañar nuestros medios de subsistencia y evitar que desarrollemos nuestra propia economía”. Cita como ejemplos el “hostigamiento a buques y la denegación del acceso a puerto para buques con bandera de las Falkland”, cartas para “intimidar y disuadir a futuros inversores”, la denegación de ingreso a puertos argentinos de cruceros que visitaron Malvinas para “perjudicar a nuestro sector turístico” y “amenazas” de eliminar el vuelo de LAN desde Chile.

Luego profundiza el tema vuelos. El de LAN, que va y vuelve a Chile con escala “periódicamente” en Río Gallegos, les permite recibir turistas, productos frescos, y es “vital para la comunidad de 300 chilenos que residen en las islas”. “Esperamos sinceramente que el gobierno argentino confirme que no tiene intenciones de eliminar este fundamental enlace”, remarca. Más adelante manifiesta que los asambleístas están “dispuestos a dialogar” con el Gobierno para “fortalecer las comunicaciones”. “Un buen primer paso sería que el gobierno argentino, si es sincero en su intención de mejorar los servicios aéreos a las islas, revoque la injustificada e ilegítima prohibición de sobrevuelo de la Argentina para los vuelos charter que desde 2003 ha obstaculizado el acceso a turistas, viajantes de negocios y otros visitantes”, dicen. Sería una muestra de “confianza que permitiría el tratamiento de otras propuestas”, agrega.

Sobre pesca, dice que “nos complacería” reanudar los intercambios “en el marco de la Comisión de Pesca del Atlántico Sur”, del que el gobierno argentino se retiró. Sugiere “reanudar la cooperación en temas concretos” e “intercambiar datos y dialogar sobre el fundamento científico de las decisiones de política pesquera, entre ellas la fecha de inicio de temporada y el volumen de captura permitido”. Verían “con agrado la reanudación de un diálogo” siempre que ambas partes tengan “muy en claro que tales intercambios versarían sobre aspectos prácticos de mutuo interés y que no deben incluir ni ser interpretados como preludio de conversaciones sobre la soberanía de las islas”. “Instamos a la Argentina a sentarse a dialogar con nosotros”, dice la asambleísta. “Los intentos por excluir, ignorar o ‘hacer desaparecer’ a los isleños ya no pueden sostenerse en una región que respeta los derechos humanos, el Estado de Derecho y la democracia”, concluye.