EL MUNDO › LA ASUNCION DE PEÑA NIETO EN MEXICO SE VIO EMPAÑADA POR LA REPRESION POLICIAL
El nuevo mandatario mexicano, un abogado de 46 años que encarna la vuelta al poder del tradicional PRI, recibió el mando de parte del ex presidente, Felipe Calderón, en una ceremonia del Parlamento ante unos 1500 invitados extranjeros.
En una jornada rodeada de disturbios y represión policial a estudiantes, Enrique Peña Nieto asumió ayer la presidencia de México. El mandatario anunció que uno de los principales objetivos de su gobierno será la pacificación del país.
Peña Nieto asumió el mando desde el primer minuto de ayer en un acto privado que se realizó en el Palacio Nacional, previo a la investidura en el Congreso. Ahí recibió la bandera mexicana de parte del presidente saliente, Felipe Calderón, y tomó juramento a los miembros del gabinete encargados del área de seguridad. El mismo está encabezado por Miguel Angel Osorio Chong al frente de la Secretaría de Gobernación (Interior), el general Salvador Cienfuegos en Defensa Nacional y el almirante Vidal Francisco Soberón en la Secretaría de Marina. Además, juró Manuel Mondragón, quien encabezará temporalmente la cartera de Seguridad Pública, de la cual depende la Policía Federal y que, de aprobarse una reforma que Peña Nieto envió al Congreso, será fusionada con Gobernación. Mondragón fue nombrado subsecretario de Seguridad Pública y Planeación Institucional. Peña Nieto, quien había prometido integrar un gabinete “incluyente” como una forma de desligar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) de su pasado autoritario y hegemónico, designó a tres independientes en el gabinete, más precisamente en las carteras de Política Social, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores, pero reservó para sus allegados secretarías clave como las que dirigirán la lucha contra el crimen organizado y la economía. El resto del gabinete juró en su cargo luego, antes del discurso inaugural.
El nuevo mandatario mexicano, un abogado de 46 años que encarna la vuelta al poder del tradicional PRI, recibió el mando de parte del ex presidente, Felipe Calderón, en una ceremonia realizada en el Parlamento ante unos 1500 invitados extranjeros. Mientras en las calles aledañas al Palacio Legislativo, unos tres mil manifestantes protestaron, varios cientos de ellos intentaron derribar un cerco policial con vallas de metal y lanzaron bombas incendiarias, piedras y petardos. Los hechos desembocaron en choques entre policías y manifestantes del Movimiento YoSoy132 que dejaron al menos 20 heridos –uno de ellos grave– y 65 detenidos.
En su mensaje inaugural anunció un plan nacional para combatir el delito y la impunidad, así como para fortalecer el tejido social, y como un segundo aspecto saliente de su gestión señaló que buscará lograr un país incluyente y la eliminación de la pobreza, que alcanza a unos 40 millones de mexicanos. “Hoy los mexicanos queremos un cambio. Deseo un cambio seguro, con rumbo y dirección”, afirmó Peña Nieto. Además agregó que es tiempo de romper los paradigmas que han limitado el desarrollo del país.
Dedicó especial importancia a la ola de inseguridad que vive el país por las acciones del crimen organizado –que provocó más de 60 mil muertos en los últimos seis años– y prometió combatir la impunidad y hacer que prevalezca la justicia y la paz. Ante varios jefes de Estado extranjeros, Peña Nieto anunció la creación de un programa nacional para la prevención del delito que reunirá los esfuerzos de todos los niveles del Estado. “Estoy convencido de que el delito no se combate con la fuerza”, afirmó. Enfatizó que México exige vivir en paz y explicó que ese “programa transversal” será aplicado por varios ministerios e incluirá el rescate de espacios públicos y brindará las garantías de seguridad para los procesos productivos. Entre sus decisiones inmediatas anticipó su intención de presentar una reforma constitucional para unificar todos los códigos penales existentes, 33 civiles y uno militar, con el fin de evitar que se castigue de manera distinta los mismos delitos. En materia económica, se comprometió a cerrar el próximo ejercicio de las cuentas públicas con “déficit cero” y garantizar la responsabilidad en las administraciones de los gobiernos estatales y municipales. “La solidez de las finanzas públicas seguirá siendo un pilar en la conducción de la economía nacional”, prometió. El presidente destacó que los gobiernos tienen la responsabilidad moral de ser austeros en sus gastos.
Después de su mensaje en el Palacio Nacional (Parlamento), Peña Nieto asistió a una ceremonia en el campo militar Marte donde recibió honores de las fuerzas armadas.
Peña Nieto no pudo asumir el gobierno con un acuerdo firmado con los opositores Partido de Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) como pretendía, pero continuará los esfuerzos en ese sentido para asegurarse el apoyo parlamentario a varias de las reformas que tiene en carpeta. Tampoco pudo evitar las marchas de protesta y rechazo a su imposición de parte de los estudiantes y del líder opositor Andrés López Obrador, quien no reconoció su derrota en los comicios de julio y ayer criticó la represión a los jóvenes. En un acto pacífico celebrado en el Monumento al Angel de la Independencia, el líder de izquierda anunció que con su nuevo movimiento, denominado Morena, liderará el desconocimiento al “gobierno espurio” de Peña Nieto y recorrerá el país.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux