EL MUNDO
Dos extraños son los que se miran
El premier Tony Blair saluda al presidente ruso, Vladimir Putin, que ayer inició una gira oficial de cuatro días a Gran Bretaña. La visita a Londres, la primera de un mandatario ruso en más de 100 años, busca reestablecer las relaciones entre ambos países luego de que Rusia condenara la invasión angloestadounidense a Irak. Putin y su esposa Ludmila fueron recibidos en el aeropuerto de Heathrow por el príncipe Carlos y se alojarán en el Palacio de Buckingham. Putin se reunirá con Blair para hablar sobre Medio Oriente y el apoyo de Rusia a Irán respecto a un reactor nuclear en ese país del Golfo.