El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil podría confirmar hoy la reapertura del juicio a 12 de las 25 personas condenadas el año pasado por nexos con un escándalo de corrupción que sacudió en 2005 al gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva. La posibilidad de reabrir el debate sobre las condenas de varios de los acusados dividió al STF. Hasta ahora hay cinco votos en favor de un nuevo juicio y cinco contrarios.

La decisión está en manos del último magistrado, el decano del STF Celso de Mello, quien anunciará hoy su voto sobre la vigencia del mecanismo que beneficia a los acusados cuyas condenas por algunos cargos no fueron definidas por unanimidad en el juicio realizado el año pasado y que fueron absueltos por al menos cuatro magistrados.

Entre los eventuales beneficiarios del recurso está el ex ministro del gabinete de la presidencia y hombre fuerte del gobierno Lula, José Dirceu, quien fue condenado a diez años y diez meses de arresto y a pagar una multa equivalente a unos 287.000 dólares, pero quien cuestiona su condena por cargos de asociación criminal.

Votaron a favor de la revisión de las penas los ministros Luis Roberto Barroso, Teori Zavascki, Rosa Weber, Dias Toffoli y Ricardo Lewandowski. En contra lo hicieron, además del presidente Barbosa, los ministros Luiz Fux, Cármen Lúcia, Gilmar Mendes y Marco Aurélio Mello.

El llamado “juicio del siglo” en Brasil se inició en agosto del año pasado y resultó en las condenas a 25 acusados de participar en el esquema ilegal, que consistía en pagar sobornos mensuales a legisladores aliados, a cambio de que apoyaran iniciativas del Ejecutivo en el Congreso. Los pagos se realizaban con dinero no declarado por el PT y por desvío de fondos públicos. Según pronósticos de analistas, en caso de que el Supremo acepte la revisión, el nuevo juicio se realizará a lo largo del próximo año, y coincidirá con la campaña de las elecciones presidenciales, parlamentarias y para gobernadores de estados federados que se celebrarán en octubre de 2014.