EL MUNDO
› LA CARTA QUE DENUNCIA EL INFORME DE INTELIGENCIA SOBRE IRAK
De los congresistas para Bush y Tenet
El Comité de inteligencia de la Cámara de Representantes determinó que la Casa Blanca se basó en información “circunstancial”, “fragmentaria” y colmada de “muchas cosas inciertas” respecto de las armas de destrucción iraquíes, según señaló ayer el diario The Washington Post. Los congresistas del Comité, que emplearon cuatro meses examinando los 19 volúmenes de información secreta usada por Bush para justificar la guerra contra Irak, encontraron “significativas deficiencias” en la capacidad de la comunidad de inteligencia para recabar información actualizada sobre Irak.
El gobierno del presidente George W. Bush reiteró su defensa de la información de inteligencia en la que fundamentó la invasión a Irak, cuando el Comité de inteligencia de la Cámara de Representantes critica la inconsistencia de las evidencias esgrimidas para aducir la existencia de armas de destrucción masiva en ese país. La Casa Blanca se basó en “evaluaciones desactualizadas” realizadas cuando los inspectores de la ONU abandonaron Irak en 1998, completada con “alguna información fragmentaria nueva” para concluir que Irak poseía armas de destrucción masiva y tenía nexos con la red extremista Al-Qaida, señalan los congresistas en su carta al director de la CIA, George Tenet.
El secretario de Estado Colin Powell y Condoleezza Rice, la consejera de Seguridad nacional de Bush, se turnaron ayer para defender la posición de la administración en las tradicionales entrevistas políticas de las cadenas de televisión. “La premisa para la guerra fue que Saddam Hussein era una amenaza, que había usado armas de destrucción masiva y que continuaba tratando de obtenerlas”, dijo la consejera presidencial en la cadena de televisión NBC. Rice fue cuestionada por el discurso de Bush sobre el Estado de la Nación pronunciado en enero, en el que se decía que Irak había tratado de adquirir uranio en Níger, a pesar de las dudas sobre la veracidad de la información expresadas por Tenet, que habían llevado a retirarla de otra declaración presidencial realizada en octubre.
El nombre de una espía estadounidense que intentó verificar si Irak había obtenido uranio de Níger fue filtrado a la prensa por funcionarios del gobierno el pasado mes de julio, lo que está siendo investigado ahora, informó ayer también el Washington Post. Tenet ha pedido al Departamento de Justicia que abra una investigación sobre la publicación en julio de la identidad de la agente de los servicios secretos, que actuaba encubierta por su condición de esposa del ex embajador de Estados Unidos en Níger, Joseph C. Wilson IV.
La CIA intervino en el nombramiento el año pasado del diplomático al frente de la embajada en ese país africano para investigar si Irak había intentado comprar uranio a Níger, informó el diario. Antes de que la identidad de la agente apareciera en la prensa, Joseph C. Wilson IV había rechazado públicamente las alegaciones del presidente Bush, de que Irak intentó comprar uranio a Níger para desarrollar armas nucleares, acusaciones que, posteriormente, se comprobó que eran falsas. La identificación de la esposa del diplomático como agente secreta fue revelada al columnista Robert D. Novak, quien dijo que sus fuentes eran dos altos funcionarios del gobierno, según el periódico.