“Los necesito, voten por mí”, dijo ayer un Arnold Schwarzenegger eufórico en el cierre de campaña de las elecciones para gobernador de California, que se realizarán mañana. Miles de personas lo siguieron a Sacramento, la capital del estado, donde el actor terminó su gira de cuatro días. “Todas esas acusaciones son parte de una campaña de los demócratas para intentar mantener el poder”, señaló “Terminator” refiriéndose a las acusaciones de abuso sexual en su contra que la semana pasada publicó el diario Los Angeles Times. Pero ayer, otras cuatro mujeres se sumaron a las once que hicieron esas acusaciones. En otra nota publicada ayer por el Times, una de ellas dijo que, hace tres años, el ex fisicoculturista la manoseó en un estudio de cine de Los Angeles. “Las últimas acusaciones que leí hoy son absolutamente falsas”, dijo Schwarzenegger a través de su vocero. Pero la semana pasada había pedido perdón por su pasado “salvaje”. De todos modos, una nueva encuesta divulgada ayer indica que sigue siendo el favorito para ganar las elecciones con el 37 por ciento de intención de voto.
“¿Acaso 15 mujeres mienten?”, dijo ayer el actual gobernador de California, Gray Davis, quien podría perder su puesto en el referendo revocatorio a manos de “Terminator”. Mañana, los californianos decidirán en primer lugar si desean destituir a Davis y, más allá de lo que voten sobre esta cuestión, deberán votar a la persona que lo reemplace entre una lista de 135 candidatos. El actual gobernador está acusado de manejar mal las finanzas de California que, pese a ser la quinta economía del mundo, este año alcanzó un déficit fiscal de 38.000 millones de dólares. “El número de mujeres que lo acusan aumenta diariamente”, sostuvo Davis en un acto proselitista en el oeste de Los Angeles. “Si se confirman, estas acusaciones son muy graves y despiertan serias dudas sobre si Schwarzenegger puede convertirse en el próximo gobernador de California”, agregó. Y exhortó a los votantes a que piensen “largo y tendido” antes de emitir su voto este martes.
Pero según el sondeo publicado ayer por el diario San José Mercury News, el número de californianos que quiere destituir a Davis en estas elecciones ha disminuido tres puntos. En una encuesta anterior, el 57 por ciento del electorado quería sacarlo de su cargo, mientras que en la de ayer, esa cifra se redujo al 54 por ciento. Este último sondeo se inició el miércoles pasado y terminó el sábado, es decir que coincide con la avalancha de acusaciones de abuso sexual contra Schwarzenegger. Para evitar que éstas sigan erosionando el apoyo de su electorado femenino, el actor pasó el cierre de campaña rodeado por mujeres, incluida su esposa María Shriver, que dio un discurso sobre las virtudes de Arnold como marido y padre de familia. Además, en una entrevista publicada ayer por el diario San Diego Union Tribune, el actor devenido político dijo que “lamenta” haberse “pasado de la raya”. Y juró a los votantes que éste es “un nuevo Arnold”.