La preocupación por un ataque terrorista en Arabia Saudita, tal vez en forma inminente, crecía ayer mientras Estados Unidos advertía que podría producirse tan pronto como hoy. “La embajada sigue recibiendo información de que grupos terroristas dentro del reino están aún activos y planificando operativos”, dijo la embajada de Estados Unidos en Ryad ayer. “Nuestro análisis es que grupos terroristas puedan poner una especial significación operativa en Ramadán, por lo que se urge a los ciudadanos estadounidenses a estar particularmente vigilantes”.
La advertencia estadounidense sigue a anuncios similares por Gran Bretaña y Australia de ataques contra blancos occidentales en Arabia Saudita son inminentes. Ramadán, que es un mes de ayuno, comienza hoy. La advertencia de Gran Bretaña el viernes, de que “terroristas pueden estar en las fases finales de planificación de ataques”, hizo eco de otra emitida por las autoridades británicas en mayo, apenas días antes de que terroristas suicidas atacaran complejos occidentales en Ryad, matando a 26 personas. “Eso no quiere decir que supiéramos entonces que algo iba a ocurrir, dijo un diplomático británico en Arabia Saudita. “Significa que la planificación estaba en sus últimas etapas. Esto refleja la evaluación de que la amenaza terrorista es seria”.
Si bien Gran Bretaña no ha sugerido a sus ciudadanos que dejen Arabia Saudita, ha advertido contra todo viaje no esencial a ese país. El gigante de defensa británico BAe Systems, que emplea a 3500 personas en toda Arabia Saudita, dijo que no tenía planes de evacuación de personal. “Hemos tomado una gran cantidad de precauciones adicionales de seguridad desde mayo para proteger a nuestros empleados”, declaró Walid Abu Khaled, un portavoz de BAe. En EE.UU., funcionarios de inteligencia dijeron que se había registrado un sostenido flujo de información que sugieren planes de nuevos ataques, pero ninguna información específica de inteligencia.
Desde los ataques en mayo, las autoridades sauditas afirman haber estado desarrollando una campaña contra militantes islámicos, parcialmente para contrarrestar las críticas de que su país no ha hecho lo suficiente en la guerra antiterrorista. Quince de los 19 secuestradores detrás de los ataques contra EE.UU, en septiembre de 2001 eran ciudadanos sauditas.
* De The Independent de Gran Bretaña, especial para Página/12.