EL MUNDO
› EL COMPLICADO ESCENARIO DEL CRONOGRAMA 2004 DE EE.UU PARA IRAK
Un verdadero problema para el virrey
Por Leonard Doyle y
Stephen Castle *
Desde Bruselas
Estados Unidos admite que para evitar el humillante fracaso en Irak necesita cuanto antes poner a sus fuerzas bajo el control internacional y apurar el traspaso de mando, declaró Javier Solana, representante europeo para asuntos internacionales. Las decisiones sobre este punto “vendrán en los próximos días”, enfatizó Solana. Sus declaraciones preceden a la visita a Londres de George W. Bush prevista desde mañana, en la que él y el premier Tony Blair discutirán una estrategia de salida de las fuerzas ocupantes de Irak. Mientras, un mensaje sonoro atribuido al depuesto líder iraquí, Saddam Hussein, afirmó que si persiste la ocupación en Irak “morirán más soldados extranjeros”.
Solana subrayó el cambio de humor de Washington: “Todos se han movido, incluyendo a Estados Unidos, porque tiene un problema real y precisa ayuda”. Existe un “consenso en aumento” de que la transferencia de poder debe ser acelerada, apuntó. Cuanto más rápido se haga, mejor”. La administración Bush hizo pública este fin de semana su nueva decisión de transferir el poder estadounidense a los iraquíes, con un gobierno de transición a partir de junio de 2004. Antes, los funcionarios estadounidenses habían dicho que los líderes iraquíes deberían redactar una Constitución y luego llamar a elecciones. Hasta ahora Washington se había resistido a poner a sus fuerzas bajo el auspicio internacional, aunque está creciendo el apoyo, en Estados Unidos, al rol de la OTAN.
Colin Powell, el secretario de Estado, arribó anoche a Bruselas para mantener conversaciones con ministros de la Unión Europea, que combinará con un encuentro con el ex secretario general de la OTAN, Lord Robertson. Los diplomáticos dicen que Powell espera “testear el agua” sobre el involucramiento de la alianza transatlántica en Irak.
Bush dijo a la prensa ayer que Estados Unidos no pasaría “muchos años” en ese país. Pero rechazó como un “comentario injusto” los señalamientos de que Estados Unidos no estaba preparado para ganar la paz. El presidente advirtió que el número de tropas norteamericanas que queden en Irak tras la transferencia programada para el 30 de junio dependerá de la situación del país. El jefe de la administración civil estadounidense para Irak, Paul Bremer, también sugirió que las fuerzas de ocupación permanecerán en el país, sobre bases diferentes: “Nuestra presencia aquí pasará de ocupante a visita”. “Estoy seguro de que el gobierno iraquí va a querer tener por un tiempo las fuerzas angloamericanas por su propia seguridad”, insistió.
Bremer dio más detalles sobre la transferencia del control político: “Habrá una Constitución interina probablemente por dos años hasta que se logre una Constitución permanente”. Y dijo que los estadounidenses trabajarían con el Consejo de Gobierno iraquí en la redacción de la misma.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.