EL MUNDO › TRES ACUSADOS EN EL CASO NóOS COMPLICAN A URDANGARIN
Gonzalo Bernal, Juan Carlos Alia y Miguel Angel Bonet dijeron que el gobierno de Baleares otorgó contratos a dedo por valor total de 2,6 millones de euros al Instituto Nóos porque estaba detrás el cuñado del rey.
Tres altos cargos del gobierno de Baleares acusados en el escándalo de corrupción del caso Nóos embarraron aún más la cancha a Iñaki Urdangarin, esposo de la infanta Cristina. Gonzalo Bernal, Juan Carlos Alia y Miguel Angel Bonet dijeron ayer que el Ejecutivo insular otorgó contratos a dedo por valor total de 2,6 millones de euros al Instituto Nóos entre 2003 y 2007 por el hecho de que Urdangarin “estaba detrás” de esa entidad. De esta forma, complica aún más la situación del esposo de Cristina, luego de que José Luis Pepote Ballester incriminara en forma absoluta a Urdangarin en la trama de desvío de fondos del caso Nóos.
Según indica el periódico español El País, el reconocimiento de los hechos forma parte de un acuerdo entre los acusados con el fiscal anticorrupción Pedro Horrach para obtener una rebaja de la petición de condena. Bernal, Alia y Bonet exhibieron los diversos matices del arrepentimiento estratégico ante el tribunal presidido por la magistrada Samantha Romero. Bernal era el gerente de la Fundación Illesport, una entidad creada por el gobierno del entonces presidente autonómico Jaume Matas para sacarse de encima las restricciones de la Ley de Contratos de la Administración y poder asignar a su antojo fondos públicos en materia deportiva. Esta fundación fue la principal encargada de contratar con la empresa Nóos Consultoría Estratégica, de Iñaki Urdangarin y su socio Diego Torres, la llamada Oficina del Proyecto, vinculada al sponsoreo del equipo ciclista Banesto-Illes Balears, en 2003, por 300.000 euros. Illesport también funcionó para adjudicar al esposo de la Infanta, sin el preceptivo concurso público, la organización de los congresos Illes Balears Forum, sobre turismo y deporte, en 2005 y 2006, valorados en 1,2 y 1,1 millón de euros, respectivamente.
La confesión de Bernal, licenciado en Derecho y directivo de la Fundación Illesport entre 2003 y 2007, fue directo al grano. “Entiendo que se eligió al Instituto Nóos porque detrás estaba la persona de Iñaki Urdangarin”, afirmó tras ser interrogado por la fiscal Ana Lamas por los dos Illes Balears Forum. “Eso sólo se podía aprobar con el visto bueno del presidente (Matas).”
El segundo acusado de ayer fue Juan Carlos Alia, ex gerente del Instituto Balear del Turismo. Este gestor turístico cesó “voluntariamente” en 2004, pero antes de eso participó en el patrocinio del equipo ciclista Banesto Illes Balears. La entidad Ibatur sirvió para particionar los contratos de la oficina de proyecto del equipo para que pudieran ser adjudicados al Instituto Nóos. “Me dijeron que tenía que pagar los 120.000 euros (el máximo de lo que esa organización podía disponer) a estos señores (Torres y Urgangarin) y eso hice”, reconoció Alia. “La orden fue: hay que hacerlo y hay que hacerlo con esta empresa”, confesó.
El tercer y último acusado de ayer, Miguel Angel Bonet, se mostró arrepentido durante su confesión. “La idea que yo recibí es que el contrato se hacía porque el señor Urdangarin estaba detrás y por ser él quien era.” Acto seguido, pidió perdón. “Debería haberme opuesto a la contratación verbal de Nóos aun a riesgo de ser despedido, fue un error gravísimo por el que pido perdón.”
La jornada de ayer termina por incriminar aún más a Urdangarin. El martes José Luis Ballester, campeón olímpico de vela, cumplió con lo que se esperaba de él. Tras un largo interrogatorio, el ex alto cargo del gobierno balear apuntaló la teoría del fiscal Pedro Horrach de que Jaume Matas era el máximo responsable del sistema que permitió al Instituto Nóos obtener contratos a dedo del Ejecutivo autonómico por valor de 2,6 millones de euros entre 2003 y 2007. Este dinero público acabó en buena parte en las arcas privadas del esposo de Cristina, mientras que los trabajos por los que se le abonaron las sumas se ejecutaban a medias o directamente no se ejecutaban. Los congresos organizados por Nóos se hicieron sobre la base de los presupuestos que diseñaba Urdangarin, que no incluían mayores explicaciones. “El 95 por ciento de las veces firmábamos en barbecho (sin saber qué estaban aprobando), pero es que venía con una instrucción muy precisa.”
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux