EL MUNDO
› ANTE LA ONU, EL PROYECTO DE EE.UU. Y GRAN BRETAÑA
El plan sin fecha de retirada
Por José Manuel Calvo y Sandro Pozzi *
Desde Washington y Nueva York
El proyecto de resolución sobre Irak presentado ayer en el Consejo de Seguridad por Estados Unidos y Gran Bretaña da la bienvenida al plan de traspaso político a Irak a fines del mes próximo mediante un gobierno provisional, pero fracasa en establecer una fecha de salida de tropas. El borrador “reafirma la autorización” para que “una fuerza multinacional bajo un mando unificado” –liderado por los 130 mil soldados norteamericanos– se encargue de la seguridad del país. Y recomienda que el asunto de mantener o no esa fuerza en Irak sea revisado por el Consejo de Seguridad a los 12 meses de adoptada la resolución.
Se proponen elecciones en enero de 2005 para una Asamblea Nacional Provisional y se establece que el nuevo gobierno manejará –bajo supervisión internacional– los ingresos del petróleo. El punto 6 de la propuesta es el que más debate suscitará en los próximos días o semanas en el seno del Consejo de Seguridad. Tras establecer que la fuerza multinacional “tendrá autoridad para adoptar todas las medidas necesarias para contribuir al mantenimiento de la seguridad y estabilidad en Irak, incluidos la prevención y el freno al terrorismo”, dice que “el mandato de esa fuerza multinacional será revisado 12 meses después de la entrada en vigor de la resolución o a petición del gobierno provisional de Irak”. Revisar un mandato no implica más obligación que ésa, y el texto no fija una fecha límite después de la cual se pueda garantizar que no hay más soldados extranjeros. Por eso, en el debate preliminar de ayer hubo intervenciones de cautela o crítica; el embajador francés, Jean-Marc de la Sablière, fue el más escéptico y señaló que las competencias del gobierno se van a negociar fuera del Consejo de Seguridad, al que se le pide que avale el resultado “como si fuera un cheque en blanco”.
China mostró también su inquietud por varios aspectos y otros embajadores pidieron conocer la opinión de Lajdar Brahimi, enviado especial de la ONU para Irak, y que se aclaren más las relaciones entre la fuerza multinacional y el gobierno iraquí. Tampoco está claro si el Ejecutivo tendrá poder sobre la policía. El representante británico ante la ONU, Emyr Jones Parry, destacó que el proyecto “subraya claramente que toda la soberanía volverá al pueblo iraquí y que el gobierno interino asumirá la total responsabilidad sobre su propia soberanía”. El número dos de EE.UU. en el Consejo, James Cunningham, aseguró que la resolución supone “un nuevo comienzo para Irak”, aunque admitió que aún hay detalles que necesitan discusión. El embajador chileno, Heraldo Muñoz, dijo por su parte que hay puntos que necesitan ser aclarados, pero que “no parece haber desacuerdos fundamentales”. “Hay diferencias, pero veo al mismo tiempo avances y un consenso creciente”, agregó.
El borrador indica –punto 7– que se creará “una fuerza multinacional distinta, dentro de la fuerza multinacional y bajo el mando unificado, con la misión de garantizar la seguridad de la ONU en Irak”, y pide a los países y organizaciones que contribuyan a la formación de esta fuerza. Y después de señalar, en el punto 8, que se debe “establecer una asociación” entre la fuerza multinacional y el gobierno soberano iraquí para garantizar la coordinación, pide “a los Estados miembros y a organizaciones internacionales y regionales de seguridad que den asistencia a la fuerza multinacional, incluyendo tropas, para ayudar a las necesidades de seguridad y estabilidad de los iraquíes y a la asistencia humanitaria y de reconstrucción”. La misma petición se hace para ayudar a formar la policía.
En cuanto al petróleo, se traslada al gobierno el control de los ingresos y se mantienen las funciones de supervisión a cargo del organismo internacional de control que ya existe. Se pide a todos los países que durante 12 meses vigilen para que no haya demandas contra Irak o sus empresas estatales, y se propone que el embargo de armas se modifique de forma que tanto el nuevo gobierno como la fuerza multinacional puedan importar armamento.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.