EL MUNDO
La coalición empantanada
El embajador de Polonia en Irak, Ryszard Krystosik, pidió ayer clemencia a los secuestradores de la rehén polaca Teresa Borcz (en la grabación), tras una entrevista en Bagdad con el presidente del Comité de los Ulemas (sunnita), Hareth al Dari. Luego del asesinato del rehén japonés Shosei Koda este fin de semana por un grupo islamista en Bagdad, el primer ministro japonés Junichiro Koizumi declaró que su país no retirará sus tropas de Irak, tal como reclamaban los secuestradores del joven. La violencia dejó ayer 25 nuevas víctimas mortales en Irak, 15 de ellas en un ataque con cohete en Tikrit y diez en enfrentamientos entre rebeldes y fuerzas norteamericanas en Ramadi, mientras que el primer ministro iraquí, Iyad Allawi, amenazó lanzar una ofensiva contra Faluja.