EL MUNDO
› FUE ASESINADO UN CINEASTA HOLANDES CRITICO DEL ISLAM
Van Gogh y una muerte de película
Theo van Gogh, un cineasta holandés que criticaba a los musulmanes, fue apuñalado y tiroteado en Amsterdam.
Por Stephen Castle *
Desde Bruselas
El realizador de una película que criticaba el trato a las mujeres bajo el Islam fue asesinado en una calle de Amsterdam ayer, alimentando el airado debate en Holanda sobre la inmigración y reviviendo recuerdos del asesinato del político Pim Fortuyn. Theo van Gogh, un lejano descendiente del artista del siglo XIX, fue muerto a tiros y puñaladas a plena luz del día en el centro de Amsterdam. Se encontró una nota sobre el cuerpo de la víctima y un hombre de 26 años de doble nacionalidad, holandesa y marroquí, fue arrestado después de un tiroteo con la policía en el que resultó herido.
El ataque fue condenado por grupos musulmanes y por el premier holandés, Jan-Peter Balkenende, quien pidió al público que no sacara conclusiones apresuradas sobre el motivo. Pero añadió que este asesinato recordaba el de Pim Fortuyn, un hombre que hacía campaña antiinmigración cuyo crimen sumió a los Países Bajos en una crisis política en marzo de 2002. “En un día como éste nos acordamos del asesinato de Fortuyn. No podemos resignarnos a ese clima”, dijo Balkenende.
Esta vez la víctima no fue un político sino un conocido y directo realizador que se convirtió en una celebridad inusual, reconocido por estar excedido de peso, lucir descuidado y ser muy fumador. Van Gogh también escribía columnas en los diarios destinadas a molestar y se describía a sí mismo como un “viejo reaccionario”. En agosto produjo su película más polémica, titulada Sumisión, cuyo guión fue escrito por Ayaan Hirsi Ali, una política holandesa de derecha nacida en Somalia. Miembro del Parlamento holandés, ella renunció a la fe islámica en la que nació y enfureció a los musulmanes al criticar las costumbres islámicas y poner de manifiesto la falta de asimilación de los inmigrantes a la sociedad holandesa.
Sumisión cuenta la historia ficticia de una musulmana forzada a un matrimonio violento, violada por un pariente y brutalmente castigada por adulterio. La obra resultó lo suficientemente explosiva para provocar amenazas de muerte a Van Gogh aunque, en una reciente entrevista radial, las descartó y dijo que la película “era la mejor protección que yo podría tener. No es algo que me preocupe”.
Ayer, testigos oculares dijeron que Van Gogh, de 47 años, fue muerto a tiros y puñaladas en la puerta del frente de la municipalidad de Lennaeusstraat, en Amsterdam, alrededor de las 9 de la mañana. Logró llegar al otro lado de la calle donde le volvieron a disparar y apuñalar, muriendo en ese momento. La policía dice que el sospechoso le disparó a otra persona y a los vehículos de la policía mientras huía al vecino Oosterpark. Hirió a un caminante y a un oficial que estaba usando un chaleco antibalas antes que la policía devolviera los disparos, impactando al sospechoso en la pierna.
Otro testigo le dijo a la Radio 1 holandesa que el asesino llegó en bicicleta y le disparó a Van Gogh cuando éste bajó de un auto. “Se cayó hacia atrás en la bicisenda y se quedó ahí. El asesino se quedó parado cerca suyo y esperó. Esperó para asegurarse de que estaba muerto.” Balkenende elogió a Van Gogh como un partidario de la libre expresión que tenía “opiniones francas”, añadiendo: “Sería inaceptable que una diferencia de opinión produjera este asesinato brutal”. El lugar de los inmigrantes musulmanes en la sociedad holandesa ha sido desde hace tiempo un tema contencioso en los Países Bajos y Fortuyn hizo campaña bajo el slogan que su tierra nativa estaba “llena”.
El país es el hogar de casi un millón de musulmanes o 5,5 por ciento de la población, y el gobierno holandés de centroderecha ha impulsado la mayor integración de los inmigrantes a través de pruebas de idioma y clases de ciudadanía. También despertó la controversia con planes para repatriar hasta 26.000 frustrados buscadores de asilo que se quedaron en el país.Atzo Nicolai, el ministro holandés para Europa, describió el asesinato de ayer como “realmente terrible”, añadiendo: “Le recuerda a todos lo que le sucedió a Pim Fortuyn”.
*De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.