EL MUNDO
A Dios rogando y con el mazo dando contra los matrimonios entre gays
Once estados votaron prohibir el matrimonio en parejas del mismo sexo, donde la moral y la religión del republicano parecen haber predominado. Por otra parte, los californianos apoyaron en las urnas fundar una investigación de células madre, a la que Bush se opone.
Por David Usborne *
Desde Fort Lauderdale
Si les gusta, llámenlo un voto antiteta Janet Jackson. El voto proarmas, el voto antimatrimonio gay o el voto Jesús. Por toda la estrategia en ambos partidos sobre los temas clave más populares y que tuvieran más probabilidades de ganar la elección para su candidato –sea Irak, terrorismo o asuntos de billetera– puede ser que ninguno terminara determinando el resultado final. La carta de triunfo parecen haber sido los temas morales. Cuando miren hacia atrás a la elección 2004, los historiadores políticos verán una tendencia por sobre todas las otras y funcionó claramente a favor de Bush y contra Kerry. Los votantes, especialmente aquellos de los estados centrales, tomaron los valores morales como su patrón principal para decidir qué candidato apoyar.
Esto puede surgir como el descubrimiento más sorprendente de esta campaña presidencial. Aun cuando significara votar contra sus más obvios intereses económicos y aun cuando albergaban dudas sobre la guerra contra Irak, los votantes se encontraron guiados antes que nada por temas morales. El país parece haber girado culturalmente hacia la derecha. Sorprendentemente, las boletas con iniciativas para prohibir el matrimonio entre parejas del mismo sexo se presentaron ante los votantes en 11 estados y fueron aprobadas en todos ellos. En algunos, aun los derechos de sociedades domésticas ya existentes ahora serán retirados. Quizás el país fue siempre así, pero de cualquier manera les dará a los demócratas serios motivos de preocupación. Su hombre era un católico, un héroe de guerra, y aun así no logró conectarse con la corriente conservadora del país. ¿Puede un candidato aun con posiciones remotamente progresistas en lo social ganar en Estados Unidos de nuevo?
Para comprobar lo que sucedió, no se necesita más que mirar las cifras de los resultados de boca de urna del martes. Más sorprendente aún, una encuesta nacional de Los Angeles Times mostró que más de la mitad de los votantes de Bush citaron temas morales como el motivo principal de su apoyo. Eran más importantes para sus partidarios que el terrorismo. Y luego miren lo que sucedía en las cabezas de los partidarios de Kerry. Citaban la economía como su principal preocupación, por encima de los temas morales, por un margen de dos a uno. Otra encuesta llevada a cabo en los tres estados más peleados mostró que los temas morales estaban primero en la agenda de los votantes de Bush en Ohio y era casi su principal preocupación en Florida y Pennsylvania, en segundo lugar después del terrorismo.
La polarización política de Estados Unidos, que los resultados de ayer demostraron tan vívidamente, es, por lo tanto, cultural. Y profundizando esa división están los asuntos de filiación religiosa. Cerca de un quinto de los votantes se describe a sí mismo como “cristianos renacidos” y el martes votaron entusiastamente por Bush como “uno de ellos” por un margen de alrededor de cuatro a uno. Entre los practicantes regulares, Bush era el ganador fácilmente. A Kerry le fue mejor con los practicantes ocasionales.
Es en parte lo que aparentemente hizo que Kerry perdiera en Florida. Bush se llevó más de la mitad de los votos protestantes y católicos en el estado, y cerca de ocho de cada 10 habitantes de Florida practican alguna de esas religiones. “Como cristiano, Bush sostiene la moral y los valores sobre los que yo creo que se construyó la Constitución”, explicaba Brett Williamson, un estudiante de Tallahassee de 20 años. “Yo creo en muchos de los mismos valores en los que cree él, estoy en contra del matrimonio del mismo sexo y en quitar a Dios de la Constitución”, dijo Chris Pierson, una enfermera en el área de Orlando.
Durante décadas, el Partido Demócrata dependió de las iglesias de las ciudades del interior, muchas de ellas bautistas, con la mayoría de las congregaciones compuestas por negros, para obtener grupos de apoyo en momentos de elecciones. Ahora, en cambio, el factor Iglesia es un factor poderoso para los republicanos. Alrededor del país, fueron una fuerza crucial para alentar a los votantes de Bush a registrarse e ir a votar. Una señal del giro conservador pueden ser las boletas con iniciativas antimatrimonio gay votadas en Arkansas, Michigan, Mississippi, Montana, Dakota del Norte, Kentucky, Oklahoma, Oregon, Utah, Georgia y Ohio. Y con la excepción de Ohio, fueron votadas por grandes márgenes. Es en Ohio, como consecuencia, donde se les puede desconocer inmediatamente a las parejas gays y lesbianas las sociedades domésticas existentes.
La única excepción en la tendencia fue el voto en California, que se volcó mayoritariamente por Kerry, y donde los electores apoyaban firmemente realizar una investigación de células madre, a la que Bush se ha opuesto. En ese estado se aprobó –59% votos a favor y 41% en contra– que se destinen 3000 millones de dólares para que se profundice en esta técnica con fines terapéuticos –para la cura de enfermedades– durante los próximos 10 años. El estado que gobierna el republicano Arnold Schwarzenagger se desmarca una vez más de la doctrina que dicta la Casa Blanca. California se convierte así en la mayor fuente de financiación en este campo de la medicina.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.