EL MUNDO
Hola, ¿Mahmud? Es tu amigo Ariel
El premier israelí Ariel Sharon telefoneó al presidente palestino electo Mahmud Abbas y se habla de una cumbre en dos semanas.
Por Donald MacIntyre*
Desde Jerusalén
Después de felicitar a Mahmud Abbas por su victoria electoral, el primer ministro israelí Ariel Sharon informó a su gabinete de coalición ayer que esperaba reunirse con el presidente palestino “en el futuro cercano”. En el primer signo tentativo de una reanudación de contactos entre las dos partes del conflicto, Sharon telefoneó a Abbas. Un comunicado israelí dijo que en la llamada, que no duró más de 10 minutos, Sharon congratuló al líder palestino por su logro personal y le deseó suerte.
Aunque aparentemente no se discutieron temas sustantivos durante la llamada, el comunicado sostuvo que los dos hombres seguirían hablando. Sharon dijo al gabinete, que ahora incluye a un Partido Laborista ansioso de reanudar el proceso de paz, que se reuniría con Abbas en conversaciones que se concentrarían en la seguridad, incluyendo esfuerzos para “parar el terrorismo”. Abbas se declaró optimista la semana pasada respecto a asegurar un cese del fuego por parte de las facciones armadas. Las conversaciones también probablemente se centrarán en una posible cooperación en torno del plan de Sharon de evacuar a más de 7500 colonos de la Franja de Gaza, todavía bajo discusión por la fragilidad de su propia coalición formada para traspasar la feroz oposición de la derecha israelí, incluyendo al menos a 13 miembros de su propio partido gobernante, el Likud.
Ahmad Qureia, a quien Abbas había dicho antes de las elecciones presidenciales del domingo que le pediría que continúe como primer ministro, dijo que los planes para una reunión todavía estaban en una fase muy temprana. Agregó: “Cuando llegue el momento correcto realizaremos una reunión bien preparada. No iremos meramente a una reunión, sino a una que sea de utilidad”. El llamado llegó después de una declaración de Abbas el lunes por la noche en la que decía que esperaba que ambos lados pudieran retornar a la mesa de negociaciones. “Extendemos nuestras manos a nuestros vecinos”, dijo. “Estamos listos para la paz, una paz basada en la justicia. Esperamos que su respuesta sea positiva.” La reunión anterior entre los dos líderes fue en agosto de 2003, durante el corto período en el cual Abbas fue primer ministro de Yasser Arafat, a quien Sharon culpó repetidas veces de fomentar la violencia y se negó a considerarlo como un potencial “compañero” en las conversaciones de paz.
Militantes de Hamas dispararon al menos cinco morteros contra colonias judías en Gaza y un cohete a la ciudad fronteriza de Sderot ayer, arriesgándose a represalias israelíes que podrían dificultar aún más la tarea de Abbas de búsqueda de un cese el fuego. Servicios de rescate en Sderot dijeron que no hubo heridos, pero varios edificios y autos fueron dañados.
Una novedad que será percibida como un indicativo del continuo revuelo en los servicios de seguridad prometidos por Abbas,es la renuncia de Jibril Rajub, quien había sido asesor de seguridad de Arafat durante el último año de su presidencia. Rajoub había sido designado en 2003 después de que le pidieran la renuncia como el poderoso jefe del Servicio de Seguridad Preventiva. En términos que implicaban que no descartaba un futuro rol bajo Abbas, Rajub dijo que se iba para permitir que el nuevo presidente palestino haga sus propias designaciones.
Menachem Mazuz, el fiscal general israelí, visitará el sur de Gaza en las próximas semanas para revisar la legalidad y el impacto de una polémica propuesta del ejército para demoler entre 200 y 3000 casas en la ya conflictuada ciudad fronteriza de Rafa, para hacer lugar a una trinchera potencialmente enorme para prevenir el contrabando de armas a través de túneles desde Egipto.
Funcionarios admitieron que los planes para Rafa no eran fijos y que una cantidad de opciones estaban bajo consideración. El ministro del gabinetepalestino Saeb Erekat calificó a la trinchera como “una catástrofe y un desastre para la gente palestina”.
Ayer se confirmó que un soldado israelí fue encarcelado en septiembre pasado, por cinco meses, por mentir para encubrir la matanza del activista del Movimiento Internacional de Seguridad Tom Hurndall en Gaza en 2003. Otro soldado israelí está en juicio por el asesinato.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Ximena Federman.