EL MUNDO
› ESPAÑA SE SUMA A RUSIA Y
VENDE MATERIAL MILITAR A HUGO CHAVEZ
Un nuevo armero para el bolivariano
Irritando a EE.UU., el gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero se sumó a Rusia y anunció nuevas ventas de armas a Hugo Chávez. Washington teme que las armas vayan a la guerrilla de Colombia, cuyo presidente, sin embargo, minimizó esta preocupación.
Por Elizabeth Nash *
Desde Madrid
José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del gobierno socialista español, defendía ayer su decisión de vender armas por valor de mil trescientos millones de euros al presidente venezolano de izquier-da, Hugo Chávez, en un acuerdo condenado rotundamente por la oposición española como un “monstruoso error”. La decisión amenaza provocar una nueva crisis entre España y Estados Unidos, tras la retirada de las tropas españolas de Irak luego del 11-M y la remoción del poder del conservador José María Aznar. Y ciertamente echa leña al fuego a la crisis entre Venezuela y Estados Unidos, que ya ha criticado la compra por Caracas a Rusia de 100.000 rifles de asalto AK-103 y de 40 helicópteros de combate.
En el mayor acuerdo de venta de armas en muchos años, las fábricas de armas españolas proveerán de 10 aviones de carga C-295, cuatro corbetas patrulleras y cuatro botes patrulleros de guardacostas al ejército de Chávez. Zapatero dijo que los vehículos serían usados para monitorear las costas, combatir el terrorismo y atrapar narcotraficantes, así como para operaciones de rescate en desastres naturales. El acuerdo fue anunciado por el presidente de gobierno español ayer durante su visita a Venezuela, donde también se encontró con sus pares, los líderes de izquierda de Colombia y Brasil. El líder opositor de España, Mariano Rajoy, del conservador Partido Popular, criticó inmediatamente la venta. “Esto es algo que el gobierno español nunca debería haber hecho. Ha provocado la censura de la oposición venezolana. Creo que lo que Zapatero ha hecho es absolutamente irresponsable.”
Pero Zapatero insistió en que el equipo era únicamente para uso pacífico. “Ninguno de estos equipos tienen potencial ofensivo en absoluto”, dijo. En una velada respuesta a las reservas expresadas por EE.UU. a las recientes compras venezolanas de armas, agregó que nadie podía sentirse ofendido o podía tener alguna objeción a la colaboración ofrecida entre España y Venezuela “que beneficiará a sus pueblos”. Washington se ha puesto profundamente nervioso por el rearme del presidente Chávez. El presidente venezolano compró recientemente armas y equipos de Rusia y Brasil. El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, dijo que no podía imaginarse por qué Venezuela, con un ejército de 34 mil personas, quería 100 mil rifles de asalto AK-103 públicamente comprados a Rusia. “Estoy preocupado. Personalmente, espero que el trato no ocurra. Si se consuma, no será bueno para el hemisferio”, dijo Rumsfeld.
Venezuela, el quinto exportador mundial de petróleo, es el mayor proveedor de petróleo de EE.UU., y el presidente Bush desaprueba fuertemente el populismo de iz-quierda del presidente Chávez. Temeroso de que Chávez mine la influencia norteamericana en la región, Washington apoyó un frustrado golpe de Estado en su contra y ha catalogado desde entonces su gobierno de autoritario.
Pero Zapatero, que tras ser electo retiró las tropas españolas de Irak, ha revertido la postura pronorteamericana de su predecesor conservador, José María Aznar. Consciente de los lazos históricos con América latina, Zapatero ha sido la punta de lanza de la primera misión de solidaridad de Europa con tres presidentes regionales: Luiz Inácio Lula da Silva (de Brasil), Alvaro Uribe (de Colombia) y Chávez, presentes en la cumbre esta semana en Venezuela.
El presidente Bush ha sido frío con Zapatero desde que fuera elegido el año pasado, y su última iniciativa probablemente no mejore las relaciones. Pero Zapatero dijo que el objetivo del trato era sólo combatir el terrorismo y el hambre. Los botes y aviones serán fabricados por la división española del consorcio aeronáutico europeo, EADS. España también quiere reparar y fabricar contenedores de petróleo para Venezuela.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Alicia B. Nieva.
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