EL MUNDO
› LA LARGA SOMBRA DEL CASO DEL PADRE MARCIAL MACIEL
Algunos gays no son tan gays
Por P. P. *
Desde Roma
El papa Benedicto XVI ha sido acusado de ignorar durante siete años acusaciones de que el padre Marcial Maciel, fundador de las Legionarias de Cristo, había abusado sexualmente de nueve adolescentes en su organización, porque Maciel era un cercano amigo del papa Juan Pablo II. En 1997 el cardenal Ratzinger era prefecto de la Congregación por la Doctrina de la Fe, que tiene el poder para excomulgar a los sacerdotes culpables de abuso sexual, cuando el obispo John R. McCann de Nueva York le presentó acusaciones detalladas de abuso sexual hechas por el padre Juan Vaca, un sacerdote en la diócesis del obispo McCann.
Las acusaciones estaban contenidas en una carta de 12 páginas al padre Marcial Maciel Degollado, que fundó la Legionarias de Cristo, la orden conservadora católica en México, en 1941. “Todo lo que hizo contradice las creencias de la Iglesia y de la orden”, escribió el padre Vaca en su carta abierta. “Cuántas veces me despertó usted en medio de la noche y me tuvo con usted, abusando de mi inocencia. Noches de temor, tantas noche de absoluto temor: tantas noches de sueño perdido, que en más de una vez puso en peligro mi propia salud psicológica.” El padre Vaca fue uno de los nueve ex miembros de los Legionarios de Cristo que acusaron a Maciel de haber abusado sexualmente de ellos cuando eran seminaristas adolescentes en la orden en la década de 1940, de los ’50 y los ’60. Los acusadores incluían a tres profesores, un maestro, un abogado y un ingeniero, así como un sacerdote. Otro sacerdote y ex miembro de los Legionarios, Juan Manuel Fernández Armenábar, hizo declaraciones en su lecho de muerte. Pero pese a la gravedad de las acusaciones, Ratzinger no hizo nada. El Vaticano confirmó que había recibido la carta de Vaca, pero no se dijo nada más.
Cuando se le preguntó a Ratzinger sobre las acusaciones, descartó las preguntas. En una ocasión literalmente le pegó a la muñeca de un reportero de televisión estadounidense, Brian Ross, que tuvo la osadía de tocar el tema. En otra ocasión, Ratzinger dijo: “Nadie puede llevar a juicio a un amigo tan cercano del Papa como Marcial Maciel”. Una actitud tan indulgente hacia presuntos crímenes homosexuales de un alto sacerdote, que además de su trabajo con su propia organización ha sido nombrado Gran Canciller de Regina Apostolorum contrasta drásticamente con la actitud del papa Benedicto hacia los homosexuales confesos de la Iglesia.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.